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Para inhibir el grado de peligrosidad que representan los postes dañados en la Ciudad de México, las 16 jefaturas delegacionales y empresas paraestatales deberán elaborar en lo inmediato un programa de sustitución de estructuras.
Hasta el momento, la delegación Iztacalco encabeza el número de quejas vecinales por el deterioro que enfrentan los postes por exceso de carga y que incluso sólo se sostienen de cables de alta tensión.
La diputada local del PRD, Beatriz Olivares, sostuvo que luego de recorrer las calles de la delegación Iztacalco se comprobó que el cúmulo de años de funcionamiento de estas estructuras han generado un deterioro considerable y que constituyen un serio riesgo para las personas.
“Se observaron postes que carecen de la base y sólo se sostienen de los propios cables y algunos de concreto que sólo cuentan con las varillas para mantenerse, en ambos casos es evidente el riesgo que representan para la población en general”, señaló la asambleísta.
Dijo que estos postes metálicos, de concreto y hasta de madera pueden ser propiedad de la Comisión Federal de Electricidad, de alguna compañía de telefonía, de alguna prestadora de televisión por cable o incluso, hasta de los obsoletos servicios telegráficos.
“En nuestros recorridos por el territorio, específicamente por Iztacalco hemos recibido un número importante de quejas sobre la peligrosidad que representan algunas de estas estructuras”, dijo.
pmba
