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La delegación Cuauhtémoc aclaró que respeta a las personas que viven en situación de calle y que no las estigmatiza.
Después de que la Secretaría de Desarrollo Social de la Ciudad de México afirmara que en el desalojo de La Ciudadela se vulneraron derechos humanos, la demarcación lo negó.
Advirtió que para preservar la integridad de los vecinos y de la población callejera no se permitirá que esos lugares sean infiltrados por personas que se dedican a la comisión de delitos.
Por ello llamó al Instituto de Asistencia e Integración Social (IASIS) para que con fundamento en los artículos 38, 47, 49 y 141 del Protocolo de Atención a Poblaciones Callejeras actúen de manera conjunta en estos espacios, así como a las secretarias de Gobierno, de Desarrollo Social y la Comisión de Derechos Humanos para garantizar la seguridad ciudadana con un enfoque de derechos humanos.
Recordó que la Cuauhtémoc implementó un operativo el pasado viernes para desmantelar cuatro puntos de pernocta en la Plaza de La Ciudadela, donde de acuerdo con reportes vecinales se presentaba venta y consumo de sustancias ilícitas, así como presunto robo a transeúnte y trata de personas, incrementando la inseguridad en la zona.
A través de un comunicado dijo que durante el dispositivo no fueron desalojados los habitantes de los campamentos y que no se remitió a ninguno de los presentes, únicamente fueron asegurados enseres en vía pública que no estaban permitidos, siempre preservando la integridad de las personas.