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Cuatro días llevan los habitantes de la colonia Educación, en Coyoacán, con agua de mala calidad. Desde el jueves pasado notaron una sustancia que daba mal olor y textura al agua.

“Parece contaminada con una especie de hidrocarburo, huele a combustible, como a diesel o gasolina, y se siente grasosa”, indicaron vecinos.

El problema inició en una sola calle, en dos casas en particular, pero con el paso del tiempo se extendió a otras calles de la colonia.

“En la calle I, de la manzana nueve, reportaron que de su domicilio salía el agua con un olor a combustible […] La incertidumbre era saber por qué el agua olía así”, comentó Ofelia, miembro del Comité Ciudadano.

Al día siguiente el agua sucia se extendió a la avenida 3, Castellanos Quinto y H. Pulido.

Varias personas contactaron a la líder vecinal para preguntarle qué estaba pasando: “Varios vecinos me decían que se habían lavado los dientes y se quedaron con un sabor como a vaselina o a crema; otro me dijo que su hijo se regresó porque vomitó en la escuela por el olor que se le quedó en la boca al lavarse los dientes, otros me dijeron que se habían metido a bañar y al salir se quedaron con un dolor de cabeza”, recordó.

Alarmados por las reacciones pidieron la intervención de las autoridades. Llamaron a Protección Civil para reportar el olor a hidrocarburo, también solicitaron apoyo del Sistema de Aguas de la Ciudad de México, pero sólo la delegación respondió.

“Vino el director de Protección Civil, Gylmar Omar Baltazar, visitó las casas de los vecinos y tomó muestras. Al mover el agua se generaban burbujas y se separaba, yo vi la expresión del director, dijo que había algo, pero no sabía qué. Hizo un muestreo aleatorio y se llevó alrededor de 20 muestras; así nos dimos cuenta de que el problema estaba focalizado en un zona”, señaló Ofelia.

Según la integrante del Consejo Ciudadano, a petición del director de Protección Civil, quien solicitó apoyo al Sistema de Aguas, llegó un laboratorio móvil: “Entre ellos comentaban que tenía un olor a diesel o gasolina, que definitivamente era un olor a hidrocarburo”.

Prometieron tener los resultados del análisis el viernes por la tarde, pero éstos no llegaron.

Aunque algunos residentes escucharon que el agua podría contener un tipo de combustible, personal de la delegación Coyoacán aseveró que el agua nunca estuvo contaminada por algún hidrocarburo, sino que sólo no estaba clorada.

Para evitar posibles complicaciones en la salud, los habitantes de la colonia Educación suspendieron el consumo de agua, sólo la usan para limpiar pisos y el baño.

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