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La propuesta en la Carta Magna de crear una sala constitucional, pone en riesgo la esencia de la Comisión de Derechos Humanos capitalina, porque abre la posibilidad de que los funcionarios apelen sus recomendaciones, lo que daría pie a litigarlos en tribunales.
En entrevista con EL UNIVERSAL, la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México, Perla Gómez Gallardo, refirió que aunque es importante que ahora se le dará al organismo la atribución de promover leyes e incluso de juicios políticos, le preocupa que también se le pretenda enfrentar ante gestiones procesales.
¿Cuál sería el cambio que para ustedes es preocupante en la nueva Constitución capitalina?
—Con este proyecto ahora se establece que cuando las recomendaciones no sean aceptadas, nosotros actuaremos como coadyuvantes del peticionario para que iniciemos un juicio de aceptación y cuando no se cumplan estas recomendaciones, nos pondrán en una situación ante un tribunal, para que ahora litiguemos contra la autoridad para ver si cumple o no.
¿Esto no sería más beneficioso para ustedes?, ¿no son más armas para que se cumplan las recomendaciones que la CDH local emite?
—El tema es muy inquietante para el organismo, ya que va en contra del sistema no jurisdiccional de derechos humanos con el que trabajamos en la institución, nosotros somos un ente de buena fe, que generalmente recibe la denuncia o la abre de oficio cuando se percibe que hay una violación a derechos humanos, además revisamos las acciones que hizo la autoridad.
Dirán que para la comisión esto será algo bueno, pues podremos ir a litigar a un tribunal para que cumplan, pero automáticamente nos convierte en parte y la autoridad va a tener que sacar pruebas de cumplimiento para que quien califique sea una autoridad judicial. Lo más grave es que la víctima va a estar viendo pasar la pelota, mientras nos ponemos de acuerdo la comisión con la autoridad frente a otro tercero, esto le quitará más tiempo y generará una inconformidad.
En este proyecto se menciona que una de sus atribuciones será la defensa de los personajes justiciables, ¿esto convierte a la comisión en juez y parte?
—Este es otro de los puntos en ser analizados por el organismo, se nos quiere poner la atribución para brindar el apoyo a los servidores públicos que pueden tener inicio de procedimientos relacionados con violaciones de derechos humanos, pero cuando emitimos las recomendaciones siempre uno de los puntos cuando hay una situación grave, es que se investigue la probable violación de derechos humanos de un servidor público, para que incluso sea sancionado, y se garantice que no haya impunidad, hay que analizar que pasará si al mismo tiempo estamos llevando esa defensoría.
¿Cómo participó la CDH local en la creación del proyecto de Constitución y qué será lo que falte?
—Fuimos invitados sólo en una ocasión, que fue para comentar los temas en materia de derechos humanos y aportamos insumos para el proceso reflexivo: los mapas interactivos, las recomendaciones emitidas y por cumplir; además de una serie de ejercicios que hicimos en la comisión donde vimos que había derechos que no se estaban posicionando tanto como otros, pero ya no tuvimos una siguiente invitación para hablar de la parte orgánica. Lo importante es identificar qué naturaleza quieren que tenga el ente.
El día de hoy la Comisión de Derechos Humanos capitalina cumple 23 años de su creación, ¿cuáles son los retos y el balance que se tienen para este año?
—En noviembre de 2013 recibí a la comisión con 5 mil 874 expedientes activos, que tenían una antigüedad de 2006; al día de hoy nos quedan sólo 997 quejas y serán menos para este año.
Hemos dado el acompañamiento a 180 manifestaciones, algo que no se daba, la gente confía más en el organismo e incluso ha disminuido la violencia que era muy común.
También la CDH local ha tratado temas de desarrollo urbano con visión en derechos humanos, se emitieron recomendaciones sobre construcciones irregulares, residuos sólidos y comercio informal, además hemos formentado que se incluya en la nueva constitución el derecho a la ciudad.