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Durante el primer trimestre del año, en la Ciudad de México se generaron 46 mil 038 nuevos empleos formales, lo que significa 13% de la cifra total a nivel nacional. Con ello, la capital del país se colocó por arriba de entidades como Nuevo León, con 38 mil 226, y Jalisco, que registró 34 mil 402.
La Secretaría de Desarrollo Económico (Sedeco) destacó que de enero a abril la población ocupada en la ciudad alcanzó 4 millones 139 mil 919 personas, lo que significó un incremento real de 3.2%.
Salomón Chertorivski, titular de la Sedeco, dijo que la Ciudad de México tiene la cifra de creación de empleos más importante del país; pero el ingreso de los trabajadores se mantiene estancado: “El mercado laboral está contratando pero con sueldos bajos”.
Reiteró que pese al impulso que se ha dado desde el Gobierno de la Ciudad de México para aumentar el ingreso de los trabajadores, “sorprende que desde el gobierno federal primero se haya dicho que había condiciones para aumentarlo y ahora, sin explicación, esto no ha sucedido”.
En su reporte económico, correspondiente al primer trimestre de 2016, la Sedeco afirma que el ingreso promedio de los capitalinos fue de 2 mil 138 pesos, dinero que no es suficiente para adquirir la canasta ampliada.
“Por eso el tema salarial es crucial, lo mismo en términos de justicia que en términos estrictamente económicos: los bajos salarios son responsables de un nivel de consumo que no puede mantenerse vigoroso en el tiempo”, destaca el documento.
Donde también se encontraron cifras positivas fue en materia de desempleo, con “la tasa más baja desde 2006”, con 5.7%; es decir, 250 mil 009 personas sin ocupación.
En el documento se detalla que el mayor número de desempleados se ubica en la delegación Iztapalapa, con 52 mil 874 personas; seguida de Tlalpan, con 26 mil 669, y Gustavo A. Madero, con 20 mil 918.
También afirma que el sector informal tuvo una disminución de casi tres puntos porcentuales, pasando de 30.6% a 27.7% en el primer trimestre.
Fase recesiva. Salomón Chertorivski indicó que sin considerarse como una “alerta”, la Ciudad de México entró en una “fase semi-recesiva”, lo que, de acuerdo con el reporte económico, “hace prever que la ciudad no pueda mantener el ritmo de expansión que mostró durante el cruce de los meses de 2015 y 2016”.
Explicó que ésta se notó en las ventas al menudeo, principalmente en el pequeño comercio, donde se había registrado un importante crecimiento, pero que tuvo una “caída” en los últimos meses y que podría ser presagio de una época difícil.
Dijo que para aminorar los efectos, desde el gobierno capitalino se mantendrán programas como Cero Clausuras y la entrega de estímulos económicos a través de Yo Te Apoyo.
En el reporte económico la Sedeco enfatiza en que las previsiones para lo que resta de 2016 no son alentadoras, ya que desde el mes de abril hay una fase “semi-recesiva”, situación que “era previsible dada la política pro-cíclica, los sucesivos recortes al gasto del gobierno federal y dado el bajo poder de compra de los salarios, en la ciudad como en todo el país”.