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Con el temor a que se suba alguien a robar en el transporte, Estela Díaz prefiere guardar su celular, su monedero, sus joyas y objetos de valor, lleva el cambio exacto en las manos y otras monedas por si algún vendedor sospechoso se sube y pide “cooperación voluntaria”.
Pese a que la Secretaría de Seguridad Pública de la Ciudad de México indicó que desde el 1 de enero a la fecha ha disminuido 23% el robo a bordo de microbús y 20.3% el robo a bordo de taxis, debido a la aplicación del operativo Pasajero Seguro, la gente no se siente segura cuando utiliza estos servicios, pues en las últimas fechas, sólo en esta semana, se han registrado cuatro homicidios durante asaltos violentos a bordo de unidades del transporte público.
Jorge Fonseca al igual que Estela prefiere no llevar objetos de valor y tener solo el capital suficiente para ir a trabajar, además del dinero extra para los asaltos.
“Es muy feo sentir temor ante cualquier persona que se sube al camión, el pensar que te pueden dejar sin dinero y hasta quitar la vida es lo peor, pero no hay cambios en la seguridad y yo creo no cambiará en mucho tiempo, ya estoy harto de que tengamos que llevar dinero por si nos asaltan”, relata Jorge Fonseca, quien vive en la delegación Tláhuac y tiene que usar tres diferentes transportes para llegar a su trabajo.
Los conductores y usuarios coinciden en que el índice delictivo que presentan las autoridades no muestra la realidad de la situación, pues los asaltos son constantes y la mayoría de las víctimas prefieren no denunciar por temor a represalias o por la dificultad en los trámites en los Ministerios Públicos.
“Ya no queremos denunciar, por todo la burocracia que representa levantar una denuncia, iniciando porque el camión se tiene que quedar parado entre una y dos semanas para que le hagan un peritaje de mecánica, los datos que dan son de 13.8 denuncias por semana, pero la realidad es que tenemos mucho más”, dijo José Antonio Sánchez de la Federación de Transportistas Independientes de México.
Señaló que en las delegaciones Tláhuac, Milpa Alta, Álvaro Obregón, Miguel Hidalgo, Iztapalapa y Azcapotzalco se registran de tres a cinco asaltos a transporte público diariamente, pero sólo 10% o menos decide denunciar.
El presidente del Consejo Ciudadano de la Ciudad de México, Luis Wertman Zaslav, señaló en entrevista para EL UNIVERSAL, que las rutas donde hay una mayor incidencia delictiva, son aquellas que llegan o salen del Estado de México, en donde el nivel de seguridad y de prevención está alejado del que hay en la capital.
“La frontera con los municipios conurbados permite que grupos delincuente se suban o se bajen en los límites del Estado de México. Cada vez que ingresan a la Ciudad son aprehendidos o sus asaltos frustrados en la mayoría de los casos”, señaló Wertman Zaslav.
Ante esta situación la SSP local y concesionario del transporte público han firmado convenios para detectar focos rojos en asaltos.