Desde 2006 a la fecha, el Sistema Penitenciario de la Ciudad de México ha trasladado a Centros Penitenciarios federales a 102 internos, principalmente porque son considerados de alto riesgo institucional y social.
Sin embargo, en el mismo lapso el Gobierno Federal ha enviado a 191 internos a penales capitalinos como consecuencia de amparos o mandatos judiciales promovidos por personas privadas de su libertad.
Entre estos internos se encuentran los dos internos del Módulo de Alta Seguridad Diamante que escaparon el pasado lunes por el archivo del juzgado 20 con sede en el Reclusorio Preventivo Varonil Oriente, luego de ser trasladados a una audiencia judicial.
Roberto Rodríguez Ramírez y Agustín Miranda Orozco fueron ingresados al Módulo Diamante en octubre de 2011 provenientes de un centro Federal de Matamoros.
Ellos ingresaron en 1987 por primera vez por el delito de robo a reclusorios capitalinos y luego de varios movimientos fueron enviados a un reclusorio federal, sin embargo, fueron regresados a la Ciudad de Mexico por la decisión de un juez.
La gran mayoría del total, más del 98 por ciento de internos enviados a penales federales, son regresados por el otorgamiento de un amparo por parte de los jueces, según informó el área de estadística de la Subsecretaría de Sistema Penitenciario de la Ciudad de México.
Los penales federales de donde provienen los internos al DF, mayoritariamente, son el Cefereso 8, las Islas Marías y el Cefereso Noroeste.
ahc
