El Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México (TSJCDMX) informa que iniciará una investigación sobre la fuga de dos internos que escaparon el pasado lunes del Reclusorio Oriente para deslindar responsabilidades.
El Consejo de la Judicatura de la Ciudad de México ordenó a la Comisión de Disciplina Judicial y a la Contraloría del Tribunal local “abrir una investigación, en el ámbito de sus respectivas atribuciones, para determinar la existencia de probables actuaciones irregulares por parte de servidores públicos”, menciona en un comunicado.
Señala que de encontrar responsables a servidores públicos y funcionarios del órgano se procederá a la aplicación “puntual y rigurosa” de sanciones administrativas y/o penales correspondientes.
Reitera que se encuentra comprometido con la resolución del caso, por lo que apoya a la Procuraduría local en la investigación.
Además explica que las causas por las que el lunes pasado se econtraban los dos reos que escaparon en el Reclusorio Oriente son “justificadas y sustentadas legalmente, y que de ningún modo tuvieron el carácter de urgente”.
En un comunicado, el órgano indicó que en el caso de la audiencia celebrada en el Juzgado 25 Penal con Roberto Sánchez Ramírez, fue por un nuevo proceso por el delito de secuestro agravado en contra de éste y ajeno a los procesos por los que ya está sentenciado, derivado de una orden de aprehensión girada en el año 2000.
Agregó que “la autoridad ministerial consignó ante el Juzgado 25 a Sánchez Ramírez el 27 de abril de 2015, toda vez que el reo había estado recluido en otros centros penitenciarios por otros procesos”.
En el caso de la audiencia realizada en la rejilla de prácticas del Juzgado 60, fue a solicitud del interno Agustín Miranda Orozco para solicitarle al juez el desahogo de un incidente.
“Es importante aclarar que Miranda Orozco estuvo el pasado lunes en la rejilla de prácticas, al haber promovido ante ese órgano jurisdiccional, el pasado 19 de abril, un incidente de prescripción de la pena de prisión impuesta”, señaló.
Precisa que el área por la que escaparon correspondió en el pasado al local del Juzgado 20 Penal, y que en la actualidad es un espacio destinado a archivo en el que se acumulan expedientes concluidos, y en la que permanece una reja en desuso y cancelada, espacio cuya vigilancia y custodia en su interior corresponde a la Subsecretaría de Sistema Penitenciario.
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