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david.fuentes@eluniversal.com.mx
Testimonios de víctimas de una banda de colombianos que se dedican al robo de casas habitación en la zona sur de la ciudad, denuncian que estos delincuentes siguen operando porque tienen “la protección” de agentes de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) así como de agentes del Ministerio Público.
Documentos en poder de EL UNIVERSAL detallan que el pasado 7 de marzo fueron detenidos y consignados al juzgado 32 penal del Reclusorio Sur con el juez Jesús Urbano López bajo la causa penal 67/20015 los colombianos Manuel Antonio García Arévalo y/o Manuel García Arévalo, Leonardo Rincón Bermúdez y Pedro Luis Martínez o Pedro Ernesto Ramírez, por el delito de robo agravado en modalidad de pandilla con las agravantes de lesiones.
Cuando se difundió la información, por lo menos tres familias se acercaron a la PGJDF y los identificaron como los probables responsables de robar sus viviendas. Una familia los señaló como los responsables golpear brutalmente al jefe de familia, un hombre de 68 años de edad. La familia reconoció plenamente a Manuel Antonio García Arévalo y/o Manuel García Arévalo, Leonardo Rincón Bermúdez y Pedro Luis Martínez o Pedro Ernesto Ramírez Quezada; el 12 de abril, cuando se tenía que ir a ratificar la denuncia, se les notificó que “debido a falta de pruebas”, los tres colombianos salieron libres.
“Hago un llamado al procurador, Rodolfo Ríos Garza, para que supervise qué es lo que pasa en los MP”, concluye el entrevistado, quien asegura temer por su vida, pues los delincuentes conocen todos los datos de su familia.
