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El jefe de Gobierno del Distriro Federal, Miguel Ángel Mancera, anunció que en la interestación Oceanía-Terminal Aérea de la Línea 5 del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro, donde se ubica una pendiente pronunciada, se construirá un túnel.
La interestación se encuentra en las inmediaciones de la zona donde el cuatro de mayo chocaron dos convoyes y que dejaron como resultado a 12 personas lesionadas.
Entrevistado en el Antiguo Palacio del Ayuntamiento, el jefe de gobierno precisó que para la obra se destinarán alrededor de 900 millones de pesos.
“Vamos a tener un proyecto muy importante que tiene que ver con la Línea 5 para la pendiente, una pendiente que cada vez le va a tener más preocupación a la ciudad de México y tenemos que hacer una inversión ahí, calculo entre 800 y 900 millones de pesos, para hacer un túnel”, dijo.
Alistan proyecto. De acuerdo con el Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro lo que se busca es corregir el perfil que actualmente tiene este tramo y que bajo la influencia del cerro del Peñón de los Baños ha incrementado al doble la inclinación de la pendiente.
Para realizar esta modificación es necesario reconstruir el cajón (la zona por donde transitan los convoyes) que actualmente es superficial, para convertirlo en túnel, lo que implicará una “transición abrupta entre arcilla y roca, demoliendo el estrato rocoso del Cerro del Peñón de los Baños”.
Con la construcción del túnel también será necesario adecuar el sistema electrónico de la Línea 5 del Metro, que incluye la señalización, mando centralizado, pilotaje automático, telecomunicaciones y energía.
Para realizar estos trabajos el STC está en proceso de licitar el proyecto ejecutivo, el cual consiste en trabajos de topografía y geotecnia, para diagnosticar las condiciones de la zona.
Corrección inmediata. Tras el choque del 4 de mayo, el Comité de Incidente Relevantes del STC recomendó corregir “de forma inmediata” la pendiente que se ubica en la interestación Oceanía-Terminal Aérea.
De origen, esta zona de la línea que fue inaugurada en 1981 se construyó con pendientes pronunciadas para evitar la formación rocosa.
La urgencia de modificar el trazo se dio luego de que se determinara que fue uno de los factores que influyó en la colisión de trenes.
El Comité de Incidentes Relevantes del Sistema de Transporte Colectivo señaló que la “transición abrupta” que se registra en la zona, no sólo influye de manera directa en el comportamiento del cajón del Metro, sino también en el Circuito Interior, sobre todo cuando se tiene presencia de lluvia.
Para mitigar el deslizamiento de los trenes en la pendiente, cuando llueve, en 2010 se construyó una techumbre de 350 metros de longitud, aunque esta no llega hasta la estación Oceanía.
Se contempla que las adecuaciones en la Línea 5 del Metro se realicen este mismo año.