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Por Arturo Ortiz Mayén
Los dos hombres que fueron encontrados desmembrados la mañana del domingo dentro de dos vagones de un tren que llegó a Azcapotzalco, vivían en Tultitlán, estado de México.
Se trata de Daniel Cruz Montes de Oca y su primo José Israel Tejeda Montes de Oca.
Ambos tenían 33 años y la noche del viernes 8 de mayo fue la última ocasión que los vieron con vida cuando salieron de su domicilio.
Las extremidades del cadáver de su tío, identificado como Joel Montes de Oca Martínez, también fueron encontradas en la misma zona, pero otras partes de su cuerpo fueron halladas entre las vías del ferrocarril en el tramo de Lechería, en Tultitlán.
Su identificación se dio gracias a los tatuajes que tenían en su cuerpo y a los rastreos de personas desaparecidas.
Aunque aún se desconoce el motivo por el que fueron asesinados, las autoridades investigan una venganza del crimen organizado relacionado con la venta de droga.
En su edición del lunes, al dar a conocer el hallazgo de dichos restos humanos en el patio de maniobras de la empresa Ferrovalle, en la colonia Santa Catarina, en Azcapotzalco, este medio informó que el tren, proveniente de Lázaro Cárdenas, Michoacán, fue inspeccionado en el municipio de Cocotitlán, estado de México, donde no se detectaron los cuerpos.
Después, la locomotora hizo dos paradas más en aquella entidad: una en Huehuetoca y otra en Lechería, donde no se realizó la revisión detallada de los vagones de la unidad.
Debido a que los restos fueron encontrados en una zona federal, la investigación fue turnada a la Procuraduría General de la República (PGR), donde se investiga como principal línea de investigación una venganza entre grupos delictivos derivado de la venta de droga.
Un informe de la Comisión Estatal de Seguridad Ciudadana (CES) del estado de México, revela que en la entidad operan distintos grupos delictivos, entre ellos células de La Familia Michoacana, La Empresa, Guerreros Unidos y Jalisco Nueva Generación, este último, relacionado con los enfrentamientos en Jalisco, donde derribaron un helicóptero del Ejército mexicano.
El procurador mexiquense Alejandro Jaime Gómez Sánchez, informó que durante los primeros cuatro meses de 2015 el número de homicidios dolosos es de 600.
