Tras las investigaciones realizadas por personal de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF), se logró ubicar a la madre y familiares de Zunduri, la joven de 22 años de edad que era encadenada y golpeada para obligarla a trabajar en una planchaduría.
Ante el Ministerio Público, la madre confirmó su parentesco y refirió que su hija dejó el seno familiar a la edad de 15 años, hecho que reportó al Centro de Atención a Personas Extraviadas y Ausentes (CAPEA), lo cual quedó asentado en el número de expediente TS2277/07 (N) el 30 de julio de 2007.
Señaló a la autoridad que un año después de realizar la denuncia de su desaparición, Zunduri regresó a casa, la joven le comentó que se había ido al estado de Michoacán, y trabajaba con una señora en una estética, sin precisar mayores datos.
Después la joven le informó que volvería a partir, pero ahora en compañía de su pareja sentimental, la madre relató al personal de la PGJDF que aceptó su partida por temor a que su hija volviera a ausentarse sin conocer su paradero.
Al concluir su noviazgo, la víctima prefirió solicitar apoyo a su patrona, Leticia Molina Ochoa, la probable responsable, quien le dio permiso de quedarse a vivir en su casa. La madre de Zunduri acordó con Leticia Molina que vía telefónica le informaría sobre su hija, esto ocurrió durante varios meses.
Zunduri irá a Argentina. La joven está arreglando sus documentos para que en los siguientes días visite Argentina, donde fue invitada al Congreso para Jóvenes Sobrevivientes de Violencia y Esclavitud, organizado por la Academia Pontificia a realizarse en Córdoba entre el 5 y 12 de mayo, luego de realizar el viaje, buscará establecerse con su madre en algún lugar del país para rehacer su vida, informó Rosi Orozco, presidenta de la Comisión Unidos contra la Trata.