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Mucho se ha dicho sobre las propiedades benéficas del coco, o del agua que se puede preparar a partir de éste. Parece ser un elemento clave en las dietas.
Algunas personas devotas a este fruto afirman que contiene grasas saludables, que son mejores para el corazón y puede incluso ayudar a perder peso. Pero Helen Bond, dietista y portavoz de la Asociación Dietética Británica, no se encuentra del todo convencida.
"La gente piensa que porque es natural, el
+ debe ser saludable, pero lo que no saben es que lleva sorprendentes cantidades de calorías y grasas saturadas".
La especialista afirma que aunque diversos medios han declarado que el coco ayuda con la pérdida de peso,"el aceite de coco tiene las mismas calorías que el aceite de oliva, pero una cucharada proporciona 13 g de grasa saturada, en comparación con los 2,1 g que ofrece el aceite de oliva.
"Los niveles de grasa recomendados, tanto para hombres como mujeres, es de 30 y 20 g, respectivamente. Lo cual deja a la cantidad que proporciona el coco como una de las más altas.
Sin embargo, las personas que apoyan el consumo del coco argumentan que la mayoría de sus grasas, son de un tipo conocido como triglicéridos, las cuales se queman rápidamente.
En particular, agrega la nutricionista, existe un gran despliegue publicitario en torno al ácido láurico, una grasa que se encuentra en el coco, sobre la cual se dice, reduce el colesterol además de que ayuda con mecanismos de inmunidad.
Al respecto, la Fundación Británica del Corazón dice que no hay suficiente investigación de buena calidad para proporcionar una respuesta definitiva sobre si la grasa saturada del aceite de coco es más saludable o no. Sin embargo, Helen Bond recomienda el aceite de colza, que también tiene un alto grado de grasas, pero son del tipo monoinsaturadas, las cuales son más saludables para el corazón.
Recientemente, tomado por varias personas, el agua de coco se ha convertido en un líquido popular para mitigar la deshidratación, ya que es libre de grasas y es rico en minerales, como el potasio y el magnesio.
"Puede ser hidratante después del ejercicio y si bien no es cero calorías como el agua, es mucho mejor que tener un refresco azucarado o bebida deportiva, pero aunque algunos digan que es más hidratante que el agua, la evidencia no apoya esta sentencia del todo", dice Helen Bond.
Puede evitar niveles altos de azúcar pero…
Un pequeño estudio publicado en 2003 en el British Journal of Nutrition mostró que al sustituir la harina de trigo con harina de coco se reduce el índice glucémico del plato, es decir, los azúcares se liberan más lentamente, lo que es beneficioso para los niveles de glucosa en la sangre.
"Y es muy rica en fibra (36 g por 100 g, en comparación con los 9 g que contiene la harina integral). Pero una vez más, es alta en grasa, grasa saturada en particular, lo que no se puede esperar en la harina".
Yogur, otra versión para consumirlo
El Yogur de coco se hace de la leche que se exprime de la pulpa de coco, lo que a veces resulta de bacterias probióticas añadidas.
"Es una opción para las personas que son intolerantes a la lactosa o alérgicos a la leche de vaca", dice Helen Bond. "Sin embargo, yo aconsejaría especial cautela, ya que la grasa saturada que contiene es un foco de alarma.
"Un yogur de coco contiene 17 g de 100 g, lo cual es casi la totalidad de la cantidad diaria recomendada para una mujer.
"El coco es bajo en azúcar y rico en proteínas, pero resulta caro para la salud si se compara con la ingesta excesiva de grasas que éste aporta", afirma Bond.