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Quienes diariamente recorremos el mundo del vino logramos desarrollar una fascinante predilección por ciertas cepas, denominaciones y estilos de vinos. Una de las regiones que más ronda mi imaginación, desde hace ya muchos años, es el sur de Italia: Taurasi es la palabra.
La primera vez que escuché su nombre fue en una conversación con Giovanni Orlotti, la figura detrás de Orfe y uno de los mayores promotores de Italia en México. Después de comprobar su potencia, complejidad y carácter frutal pude entender sus palabras: “Carlos, el Taurasi es uno de los grandes exponentes de la vitivinicultura italiana, uno de los cuatro pilares de la enología clásica junto al Barolo, al Brunello di Montalcino y al Amarone”. ¡Pum!
Elaborado en la provincia de Avellino, en la región de Campania, el Taurasi es un vino tinto tranquilo elaborado con mínimo un 85 por ciento de uva Aglianico, de las más importantes del sur de Italia, valorada por su piel gruesa, maduración tardía y complejidad sensorial.
Reconocido como una DOCG (Denominazione di Origine Controllata e Garantita) desde 1991, tiene como cepas de complemento a la Piedirosso, fresca y aromática, y la Primitivo di Puglia, utilizada generalmente para acelerar la maduración y potenciar las notas frutales. Tras la vinificación, el fermentado debe añejarse al menos tres años, uno en barrica de roble; los Taurasi Riserva deben envejecer al menos cuatro años.
Cautiva, además, saber que se trata de un caldo regional cuya producción limitada hace que sea difícil probarlo incluso en territorio italiano. ¡Sí!, una rareza que encanta.
¿Sensorialmente? Es un vino de color rojo rubí con reflejos granates y, en ocasiones, naranjas. En nariz es sumamente afrutado, potente y vigoroso; cerezas negras, ciruelas, chocolate, balsámicos, menta fresca, incienso, eucalipto, canela y anís, entre muchos otros aromas, dan vida a su paleta olfativa. También es un vino de taninos elegantes, dulces y suaves, que se engancha en el paladar por larguísimos periodos de tiempo.
La cantidad de horas sol en la viña y la maduración tardía de las uvas destinadas a su producción deriva en un excelente contenido alcohólico, característica que también hace de estos vinos un punto de encuentro para platillos de gran potencia gustativa. ¿Con qué? Con todo, prácticamente, desde estofados especiados hasta quesos maduros, borrego, asados y platos de montaña con buen porcentaje de grasa.
Ponga atención que viene lo mejor. Uno de los aspectos más destacados de los Taurasi es su accesibilidad; literalmente, uno puede disfrutar una de las expresiones más fascinantes del terruño
italiano a un precio más bajo que el de los grandes Sangiovese de la Toscana o los Nebbiolo del
Piamonte.
