Las chinampas es uno de los modos de producción más óptimos del mundo, combinando varias hortalizas, vegetales y frutos de tal manera que cada uno se desarrolla sin molestar a los otros e incluso promoviendo su crecimiento.
Mientras en Xochimilco se va perdiendo la tradición chinampera, en otras partes del país con abundancia en agua como pantanos y zonas susceptibles a inundaciones en Veracruz y Tabasco se pretende introducir este sistema de cultivo. Esta tradición hoy en día es de vital importancia ya que produce una gran cantidad de alimentos para cubrir las necesidades alimentarias de los mexicanos.
Chile serrano
Una milpa no puede estar completa si le faltan chiles, como el serrano. Generalmente este chile se consume inmaduro, es decir, cuando está verde.
Col morada
También conocida como repollo o col lombarda. Esta verdura se adapta a todo tipo de cultuvo, y en las chinampas, se da muy bien. Es un antiácido natural.
Maíz
Cereal originario de México del cual se conocen cerca de 305 especies diferentes; es rico en lípidos y almidones. Es un alimento fundamental en la dieta mexicana.
Frijol negro
Esta variedad de frijol es muy popular en los estados que colindan con el Golfo de México, así como el sur y el sureste. Preparálos refritos como guarnición.
Haba
Prepara una ensalada de habas frescas con nopales, cebolla morada, chile y cilantro picados, y un toque de vinagre de manzana. Estas hortalizas son bien nutritivas.
Jitomate
La variedad cherry se ha vuelto muy popular para emplearse en ensaladas y guarniciones; no obstante, el guaje es el rey si hablamos de preparar salsas, adobos, etc.
Lechuga
Las hortalizas de hoja son muy buenas para adaptarse a diferentes condiciones de suelo. Ya sean rizada, romana o italiana, éstas siempre complementarán un huerto.
Rábano
De esta hortaliza se consume la raíz, que suele ser picante y de sabor fuerte, picante y algo crujiente. En nuestro país, las hojas de rábano se utilizan para pipián.
Calabaza
Es una planta rastrera o trepadora y su cultivo se lleva muy bien con el jitomate, el maíz, frijol y chile, ingredientes que, en su conjunto, son la base de la alimentación mexicana.