Tradicionalmente se le conoce como "La fruta de la salud" gracias a que es rica en nutrientes, diurética, fibra y se le atribuyen muchas propiedades curativas.
La manzana es una de las frutas más deliciosa y por su sabor es recomendable para elaborar con ella una gran variedad de platillos y postres, así como en la preparación de jugos y licuados.
Con esta maravillosa fruta también se realiza compota de manzanas, zumo, jaleas, pasteles y otros muchísimos más postres muy populares.
Actualmente son muchas las variedades existentes en el mercado y su precio es muy variado, pero siempre al alcance del público.
Son ricas en pectina (buen aliada contra el colesterol y la diabetes), aminoácidos, ácidos, azúcares, fibras. Popularmente se le asignan propiedades antiinflamatorias del aparato digestivo, gracias a la pectina es a la vez laxante suave y astringente en caso de diarréas o colitis, diurético y depurativa, incluso anticatarral e hipotensora. Incluso el zumo de manzanas se presenta frecuentemente como producto de belleza, capaz de suavizar el cutis. Ayuda a quemar grasas.
En el mercado se pueden encontrar una gran variedad como; Rosáceas, de las que hay cerca de 2.500 variedades conocidas y del género Malus. La mayor parte casi un sesenta por ciento se consume en fresco. Algunas variedades pueden consumirse todo el año, otras desde abril hasta diciembre. Las más conocidas son la "Golden Delicious", "Red Delicious", "Starking", "Richared", Reineta Blanca del Canada", "Verde doncella", "Galiaxis", "Gala", "Fuji", "Belleza de Roma", "Esperiega de Ademuz", "Granny Smith".
Las más conocidas Golden & Red Delicious conserva su forma y rico sabor suave cuando está cocida al horno o cocinada. La piel es tan blanda y fina que puede comerse sin pelar (mejor las rojas para comer). ¿TE INTERESA HACER UN DETOX? TE DICIMOS COMO, SIN CORRER RIESGOS. CLICK
Las mejores manzanas son las que están duras y no tienen partes blandas. Hay que evitar las que están descoloridas dentro de cada variedad.
Hay que mantenerlas en bolsas de plástico en el refrigerador tras la compra para evitar que prosiga su maduración. Las manzanas se pueden mantener así hasta unas seis semanas. Sin embargo, hay que revisar a menudo y retire cualquier manzana que empiece a ponerse mala.
Prepare los platos de la manzana momentos antes de servir para reducir al mínimo broncear (oxidación). Proteja las manzanas del corte contra la oxidación sumergiéndolas en una solución una porción de jugo de la fruta cítrica y de tres porciones de agua.