Aprovechando que las fiestas patrias están a la vuelta de la esquina, te recomendamos estas bebidas que prepararán tu garganta para gritar ¡Viva México!
Agua de Jamaica. También llamada hibisco, suele ser acompañada de limón o jengibre y azúcar.
Café de olla. Sin duda es la forma más típica de hacer café, para preparar esta bebida se calienta agua, granos de café, canela y piloncillo en una olla de barro.
Charanda. Aguardiente de caña de azúcar, tradicional en Michoacán.
Chileatole. Es una bebida de maíz fermentado con chile y sal que se prepara en los estados de Puebla y Tlaxcala.
Chocolate. Se hizo popular en todo el mundo después de la Conquista. Puede ser preparado con leche o con agua, como se acostumbra en Oaxaca.
Chumiate. Originaria del Estado de México, es una infusión de nanche en aguardiente de caña.
Horchata. Forma parte de las famosas “aguas frescas”, lleva harina de arroz, leche en polvo y azúcar o leche condensada, a veces se aromatiza con especias como canela y vainilla.
Ponche. Se elabora con diferentes frutas como el tejocote, la caña, el tamarindo, etc. Se endulza con piloncillo y en ocasiones se le agrega un chorlito de mezcal, tequila o ron.
Pozol. De origen tabasqueño es una bebida a base de masa de maíz fermentada, cacao molido y agua fría aderezada con sal o chile.
Pulque. Es una bebida prehispánica que se hace a partir de la fermentación del aguamiel del agave pulquero.
Tascalate. Bebida refrescante típica del estado de Chiapas, para elaborarla se muele cacao, maíz tostado o tortillas, achiote, piñones y canela.
Tejate. Es una bebida tradicional que se prepara en el estado de Oaxaca; se trata de una combinación de maíz, huesos de mamey y flor de cacao.
Tepache. Actualmente se produce a partir de la fermentación de los azúcares de la piña y requiere de cuatro días para su elaboración.
Tequila. Se obtiene por la fermentación y destilación del jugo de una variedad de maguey.
Finalmente una bebida producida con el destilado de aguamiel del maguey que no puedes perderte, es el mezcal, porque “para todo mal, mezcal; para todo bien, también; y si no hay remedio, litro y medio."
