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Proveniente de la India, un lassi es una bebida tradicional refrescante y nutritiva que se prepara a base de yogur natural (alrededor de 70 por ciento), agua y un sabor que puede ser dulce o salado. Se pueden utilizar diferentes ingredientes como mango, fresa, zarzamora y coco; así como cilantro, cardamomo y comino, entre otros, ya sea juntos o separados. Inicialmente los lassis se prepararon en las zonas de Medio Oriente donde las altas temperaturas hacían que la leche fermentara pronto. Así que se creó el yogur, el cual se complementó con diversos sabores locales. “Allá se acostumbra salado porque el calor aumenta la sudoración y la pérdida de sales, por lo tanto sirve para evitar la deshidratación. Además se tiene que servir frío y al momento para disfrutarlo más,”ex plica Riaz Ahmad, chef de Tandoor. La elaboración es muy sencilla y la cantidad de azúcar es al gusto; sin embargo, la recomendación del experto es probar primero la receta original para tener un punto de comparación en el paladar. Después, se puede experimentar con una gran variedad de ingredientes y, como un toque original y personal, adornar con frutos secos picados, semillas o pistaches y almendras laminadas.
La opción americana
Por otro lado están las clásicas malteadas, que son originarias de Estados Unidos. De acuerdo con Food Timeline, la primera se creó en 1887 y responde a la traducción de la palabra en inglés milkshake , que significa batido de leche o malteada. En un inicio se trataba de una mezcla de leche en polvo, cebada procesada y de trigo, además de leche. Con el tiempo se fue transformando en una combinación de helado, leche entera, malta líquida o en polvo, y saborizante o fruta. Su popularidad ha aumentado de tal forma que hay una infinidad de recetas, sabores y texturas. Si bien, es una bebida que se sirve fría, no necesariamente funciona para combatir el calor, pues debido a sus ingredientes es más calórica y espesa. La receta original la realizan en restaurantes como Grandpa Elliot, donde el concepto se centra en la comida estadounidense. No obstante, también hay creaciones muy originales de malteadas que te pueden inspirar para hacer las propias. Seguramente las malteadas las has probado alguna vez, mientras que un lassi es algo nuevo. Lo ideal es que experimentes con ambas, primero con la preparación clásica, y después con otros ingredientes, hasta encontrar tu favorita.
