La tuna es una de las pocas frutas que nos regala la milpa junto con los jitomates y las chilacayotas. Son los hijos del nopal, de piel dura pero que en su interior nos espera una pulpa dulce y aguañosa que por un momento nos hace olvidar el calor. Por lo general se comen solas, a modo de agua fresca o con chile piquín. Ahora, se le encontró un nuevo uso, dos estudiantes del Colegio de Estudios Científicos y Tecnológicos del Estado de Hidalgo (Cecyteh), plantel Poxindeje formularon un endulzante natural extrayendo la pulpa de la tuna y por medio del método de evaporación obtener un polvo color arena con el cual poder sustituir al azúcar de caña.
Bajo la supervisión de la bióloga Blanca Esthela Olguín Gálvez, Lorena Fuentes Díaz (17 años de edad) y Lorena Gómez Vázquez (20 años de edad) crearon el producto llamado Candittun. Es un azúcar soluble que proviene de la tuna blanca (Opuntia ficus-indica) por ser fuente de vitaminas, minerales, calcio, potasio, aminoácidos libres, fósforo, fibra, polifenoles y betalaínas. Dicha especie crece en abundancia en Hidalgo, Puebla y Estado de México y es de fácil acceso debido a su bajo costo.
Ideal para quien padezca diabetes
La tuna blanca contiene un glucósido llamado saponina que al ser asimilada por el organismo el nivel glucosa en la sangre baja teniendo mayor sensibilidad a la insulina. Por cada kilogramo de tuna se obtiene 140 gramos de azúcar que su vez contienen 12 gramos de carbohidratos, 18.5 gramos de vitamina C, 3.6 gramos de fibra, 940 miligramos de proteínas, 500 miligramos de grasas, 75 miligramos de calcio,109 miligramos de magnesio y 276 miligramos de potasio, de acuerdo con el estudio bromatológico realizado.
Cabe resaltar que el azúcar de tuna funciona como antioxidante gracias a la vitamina C, además de que contiene 67 veces menos calorías que el azúcar común de mesa.
De tuna me como dos platos
La tuna tiene un color variado que va del verde claro al rojo y amarillo con sabores ácidos y otros dulces. Su alta estacionalidad hace que la tengamos disponible la mayor parte del año ya que sus frutos maduran en mayo, agosto y noviembre.
Aunque la tuna blanca se da en los estados ya mencionados, su diversidad de la misma está en tres regiones: Puebla (Acatzingo y Quecholác), Valle de México (Estado de México e Hidalgo) y el Altiplano Potosino-Zacatecano (Aguascalientes, Jalisco, Guanajuato, San Luis Potosí y Zacatecas).
Con información de Prensa Conacyt y la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad Recursos y Servicios