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La Coalición Por México al Frente, integrada por el PRD, PAN y Movimiento Ciudadano, tiene por objetivo obtener la mayoría de los votos el próximo 1 de julio para ganar la elección presidencial, al mismo tiempo que busca ser la fuerza legislativa mayoritaria en el Congreso, de tal modo que pueda impulsar la formación del primer gobierno de coalición en la historia democrática de México.
Las elecciones de 2018 serán las más grandes en la historia del país ya que, además del proceso electoral federal, sólo dos entidades no tendrán elecciones locales: Baja California y Nayarit. La elección presidencial y las de 500 diputados federales y 128 senadores, tendrán lugar al mismo tiempo que la elección de dos mil 778 cargos de autoridades locales. Tan sólo el hecho de ser las elecciones más grandes organizadas bajo las reglas democráticas hace que este proceso electoral adquiera enorme trascendencia.
Con varios cambios por probarse producto de la reforma política de 2014 y de la primera Constitución Política de la Ciudad de México, arribamos al proceso electoral que medirá no sólo la fuerza de cada organización política y ciudadana, sino también el interés de las y los ciudadanos por participar en las elecciones en momentos que el desinterés y el descrédito de la política parece dominar el ánimo social.
Para la Coalición Por México al Frente, esta elección es la oportunidad de emprender un cambio profundo para el país, no se trata de ganar por ganar elecciones y puestos, se trata de hacer y mantener una fuerza política aliancista antes, durante y después de las elecciones, dando continuidad a una propuesta política que tiene en su centro el cambio de régimen, de ahí que exista el compromiso de conformar un gobierno de coalición si se gana la elección presidencial.
La reforma constitucional de 2014 al artículo 89, fracción XVII, faculta al Presidente a “optar por un gobierno de coalición con uno o varios de los partidos representados en el Congreso”. Para que esto sea una realidad a partir del 1 de diciembre de 2018, se requiere aprobar la ley secundaria respectiva antes de la entrada en vigor del nuevo gobierno. Hace casi un año, en septiembre de 2017, presenté a nombre del Grupo parlamentarios del PRD, una iniciativa para expedir la Ley Federal de Gobiernos de Coalición, existen otras iniciativas presentadas sobre la materia en el Congreso, por lo que material para dictaminar existe, voluntad política es lo que falta.
Es necesario emprender el cambio democrático en todo el país, combatiendo y castigando la corrupción de funcionarios y representantes populares; quitando poder a las mafias enquistadas alrededor de núcleos de poder en municipios y gobiernos estatales y el federal; reformulando la distribución de la riqueza y haciéndola más justa y equitativa; brindando seguridad real y efectiva, así como justicia, a todas las personas; todo ello y más debe hacerse con compromiso, de cara a la gente, impulsando acuerdos sociales y políticos efectivos y duraderos, que permitan defender el pleno ejercicio de las libertades y garantizar el acceso a todos los derechos humanos para todas y todos.
El cambio de régimen no es sólo una frase para usar en campaña, es un compromiso a impulsar desde la Coalición Por México al Frente, sea cual sea el resultado que se obtenga el 1 de julio próximo. Muchos creemos que la vía para lograrlo es concretar un gobierno de coalición, donde la mayoría no sea una simple aplanadora monolítica, al estilo del PRI, sino que se fundamente en la participación de la ciudadanía, la interlocución con la sociedad civil y el ejercicio responsable del poder público, donde el combate a la corrupción, la transparencia, la rendición de cuentas no son la graciosa concesión de los gobernantes, sino el resultado de la participación y la vigilancia de la ciudadanía sobre sus gobernantes.
Coordinador del Grupo Parlamentario
del PRD en el Senado de la República