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El cambio que se dio el primero de julio era inevitable por varias causas: hartazgo, por el fracaso de los proyectos económicos en materia de reducción de la pobreza y de la desigualdad; extrema inseguridad pública; y una corrupción rampante y extendida. El triunfo de Morena fue rotundo.
Ese apoyo, de por sí contundente, incluso ha aumentado desde entonces a la fecha, hasta alcanzar una aprobación de 66%. Eso no quiere decir que antes no existiera un proyecto para superar esa lamentable situación, con otra visión, distinta a la que maneja AMLO. A ese proyecto dedicaron su esfuerzo varias generaciones de mexicanos, durante muchas décadas. Se hicieron cosas y había proyecto, pero uno distinto al de AMLO. En los comicios, 47% de los electores no votó por AMLO, pudiendo haberlo hecho. Hoy, 24% de los mexicanos no aprueban su gestión, y 9% no están definidos. Además, sólo 37% piensa que será capaz de resolver problemas, 35% que respetará la legalidad y el orden, y 30% que será honrado como gobernante (encuesta trimestral GEA-ISA, marzo 2019). Entre ese numeroso contingente del electorado se ubican muchos de quienes compartían el otro proyecto, que no se difuminó por la mera elección. ¿Cuáles son los elementos centrales de ese proyecto?, ¿quiénes y cómo lo rescatarán como opción política?
1. Se trata de un proyecto de un país independiente y soberano, garante pleno de las libertades de todos sus integrantes (culto, profesión, reunión y manifestación). Una nación organizada como una democracia liberal. 2. Se trata de un país donde prevalezca el Estado de derecho, un Estado de leyes para gobernados y gobernantes.
3. Una economía de mercado, preponderantemente constituida por particulares, pero con una participación selectiva y firme del Estado. El esfuerzo colectivo orientado hacia la búsqueda de la prosperidad, de una economía en expansión y generadora de riqueza. 4. Integrar un proyecto egalitario integral. Una política social que incluya, por ejemplo, acceso universal a la salud, un sistema amplio de pensiones dignas, red social de protección para la tercera edad, combate focalizado a la pobreza, entre otros.
5. Educación como instrumento central de la movilidad social y la reducción de brechas. Sistema educativo laico, de acceso abierto, gratuito, y de calidad. 6. Economía abierta al mundo, no parroquiana (TLCAN), que enfrente la competencia de los mercados internacionales.
7. Preocupación central por la seguridad y la impartición de justicia. El proyecto de justicia se inició, pero no concluyó bien. La reforma de la SCJN en 1994 fue la punta de lanza de dicho proyecto. 8. Federalismo funcional: gobernadores democráticos, fuertes, competentes, y honestos. El municipio como base de la organización política.
9. Apertura a mayor transparencia, que lamentablemente no fue acompañada de una estrategia efectiva de combate a la corrupción (SNA). 10. Propuestas para la ampliación de libertades: desde las más básicas para la comunidad LGBT, pasando por la libertad de prensa, y el ejercicio de la libertad de expresión.
11. Entendimiento acerca de la función de las Fuerzas Armadas, incluso en temas de seguridad, que concluyó en el periodo de Felipe Calderón. Roles definidos en materia de paz externa, de lucha contra el narcotráfico (erradicación, ...), ayuda en caso de desastres naturales, pero no como eje en materia de seguridad pública. 12. Una estrategia de la relación con los EUA. Visiones como “prosperidad compartida” ejemplifican los ángulos que permitían una coexistencia llevadera. En esa estrategia nunca hubo una visión en materia de migración, ahora tan urgente.
13. Carencia de una reforma fiscal a fondo, que resuelva la precariedad fiscal del gobierno, que lo vuelve vulnerable e impotente.
El cambio en curso es distinto a la concepción previa, de quienes no votaron por López Obrador. Entre 25% y 30% no coincide con AMLO. Sólo 21% de la población cree que podrá mejorar la seguridad, igual que quien piensa que combatirá la corrupción; 19% que tendrá éxito en combatir la pobreza, y sólo 21% que impulsará el crecimiento económico. No todo México concuerda con el proyecto de López Obrador. ¿Dónde quedó el proyecto previo? Está vivo y vigente, y sus autores están ahí, ¿qué van a hacer?, ¿cómo lo van a recuperar?
Presidente de GEA Grupo de Economistas
y Asociados / StructurA
