Desde las tierras de Castilla y León llegó Andrés Araya, a quien podríamos llamar el embajador de los hoteles boutique de lujo en España, para presentar una propiedad que por derecho propio se ha ganado el título de Mejor Hotel de la Península Ibérica, el cual, obviamente está a su cargo.
Se trata de la Abadía Retuerta, un antiguo monasterio del siglo XII que alberga en su interior a uno de los hoteles más comentados y prestigiados de Europa, rodeado de viñedos y de su propia bodega, que guarda emblemáticos vinos de Pago.
Rescatar y remodelar la edficación original tomó cerca de ocho años para convertirlo en LeDomaine Abadía Retuerta, un hotel boutique de lujo extremo que tiene únicamente 30 habitaciones y suites, instalaciones amplias y confortables, así como una envidiable colección de arte de grandes maestros que, sin duda, es su mayor patrimonio.
Su restaurante Refectorio cuenta con una estrella Michelin, gracias a la intervención de la escuela del célebre Aduriz con su restaurante Mugaritz, y de Marc Segarra al frente de los fogones, ofreciendo cocina de producto y de temporada.
Entre las novedades que tendrá el inmueble se encuentra la próxima apertura de su spa Santuario, construido subterráneamente, para no interferir con el paisaje de viñedos alrededor de la abadía, y una alberca exterior idónea para disfrutar durante el cálido verano español, que se suma a la piscina interior (ubicada dentro del spa).
El hotel y bodega se localizan justo al inicio de la región de Ribera del Duero, famosa por su ‘terroir ’, donde se producen magníficos vinos, muy cerca de la ciudad de Valladolid.
