La Comisión Estatal de Derechos Humanos abrió una investigación por la muerte de 17 presuntos delincuentes en enfrentamientos contra policías, militares y marinos, en la sindicatura de Villa Unión, en el municipio de Mazatlán.
José Carlos Álvarez Ortega, ómbudman estatal, instruyó a la visitadora de la zona sur del estado recopilar evidencias y testimonios sobre los hechos que iniciaron la noche del viernes pasado. Ese día asesinaron a dos personas cerca de una tienda departamental. Señaló que hasta el momento no se tiene reporte ni quejas de víctimas colaterales por los sucesos, en los que hubo 19 muertos.
Joel Ernesto Soto, secretario de Seguridad y Tránsito de Mazatlán, detalló los hechos que inicaron la noche del viernes que iniciaron con la ejecución de dos personas. El mando explicó en el camino de la comunidad del Aguaje de Costilla a las Amapas, se toparon con un convoy que abrió fuego. Posteriormente llegaron refuerzos y fue cuando se registró el enfrentamiento. El mando dijo que no descartó que durante el último enfrentamiento que tuvieron contra el grupo armado algunos de los criminales lograron huir. En tanto, el fiscal estatal Juan José Ríos reveló que sólo uno de los diecisiete presuntos delincuentes abatidos no resulto positivo, en cuanto a exámenes de residuos de pólvora en las manos.
Esperan informe sobre amenaza. La Secretaría de Seguridad Pública de la entidad dispone de tres días para rendir un informe por escrito sobre los hechos en los que dos visitadores de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) y custodios fueron encañonados y amenazados por elementos de la policía estatal.
José Carlos Álvarez Ortega, ómbudsman de Sinaloa, informó que a pesar de que el domingo fue removido de su cargo el director de la Policía Estatal Preventiva, Carlos Ramiro Rojas Guzmán, la investigación continúa. Agregó que la Comisión Nacional de los Derechos Humanos hizo un fuerte pronunciamiento y espera la respuesta oficial para determinar las acciones que se van a seguir.