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La tarde del viernes en Acapulco el gobierno del estado y la Federación pusieron en marcha un operativo especial para blindar los destinos turísticos para Semana Santa con más de 3 mil 444 policías y militares; para este lunes en Guerrero había 28 muertos.
La violencia mostró una imagen dantesca: ocho cuerpos con señales de tortura aparecieron amontonados en una camioneta la noche del domingo en Chilpancingo. De acuerdo con el reporte, los ocho jóvenes —entre 25 y 35 años— tenían huellas de haber sido tableados (golpeados en los glúteos) y asfixiados.
La violencia de los últimos años en Guerrero ha afectado a su principal actividad económica: el turismo. Hace unos días, la naviera Holland America Line anunció la cancelación de ocho cruceros para este año y el siguiente por motivos de seguridad.
El presidente de la Asociación de Hoteles y Empresas Turísticas de Acapulco (Aheta), Jorge Laurel González, informó que para este año se tiene programado el arribo de 38 cruceros, un número lejano a los 180 que llegaban hace años, cuando el puerto aún no era catalogado uno de los más violentos de México. La caída de la llegada del turismo extranjero lleva una tendencia sostenida. Por ejemplo, hace unos años arribaron hasta 12 mil jóvenes, mientras que el año pasado apenas fueron 800.
En diversos informes desde hace años de manera constante, Acapulco ha sido ubicado como una de las ciudades más violentas del país y del mundo. En 2016, por ejemplo, ocurrieron 918 asesinatos de los 2 mil 213 homicidios dolosos registrados en todo el estado. La zona es el principal centro turístico de Guerrero.
La violencia de los últimos días se centró en los municipios de Chilpancingo, Tlapa, Atoyac, Ayutla, Acapulco, Tixtla y Acapetlahuaya. El viernes fueron asesinados cuatro en Chilpancingo. A las 04:30 horas del sábado, hombres armados comenzaron a enfrentarse dentro del bar La Malkerida, ubicado en uno de los principales centros turísticos de Guerrero, Ixtapa, Zihuatanejo. La refriega terminó con cuatro personas muertas y dos heridas y con la zozobra de los demás clientes. Esta balacera marcó el arranque del operativo y el comienzo de uno de los fines de semana más violentos del año. El sábado en Acapulco fue encontrada una fosa con dos cuerpos; en Ayutla, en la Costa Chica, un hombre murió en el hospital después de haber sido baleado.
Sobre la carretera federal Chilpancingo-Chichihualco fue hallado el cuerpo de un hombre en estado de descomposición. En la Costa Grande, en Atoyac, fueron asesinadas dos personas, un hombre y una mujer, que encontraron muertos en un brecha de terracería. En Tlapa hallaron otro cuerpo y encontraron un cráneo en Tixtla. En Acapetlahuaya, la tarde del domingo hombres armados llegaron a una casa del barrio La Guadalupana y a tiros interrumpieron una fiesta familiar. En el convivio se encontraba el ex diputado local y ex alcalde de ese municipio, el perredista Roger Arellano Sotelo. Los tiros le dieron al ex legislador y a su tío, Octavio Arellano Eloisa, quien murió en una clínica, mientras que Arellano falleció cuando era trasladado a un hospital de la CDMX.
La mañana del domingo, en una colonia del oriente de Chilpancingo, fue encontrado el cuerpo de un niño de 13 años. Estaba envuelto en bolsas negras y con señales de haber sido asfixiado. El menor estudiaba la secundaria y trabajaba en una lavandería y se convirtió en el quinto menor asesinado en lo que va del año en la capital.
Hasta antes de las ocho de la noche del lunes dos personas habian sido asesinadas a tiros en Acapulco, y en la región de la Toerra Caliente, Modesto Carranza Catalán, suplente del diputado del PRI, Saul Beltrán Orozco, compadre de Raybel Jacobo de Almonte, El Tequilero, fue asesinado por hombres armados.
