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Vecinos de al menos una decena de parques y áreas naturales de la Zona Metropolitana de Guadalajara y la ribera de Chapala se constituyeron este miércoles en una red para defender estos espacios públicos, pues consideran que tanto el gobierno estatal como las diferentes administraciones municipales los están afectado a través de distintos proyectos inmobiliarios o de infraestructura.
Indicaron que los parques, bosques, arroyos, barrancas y lagos que se encuentran en el área de influencia de la ciudad proveen de servicios ambientales a más de 4.6 millones de personas, por lo que su fragmentación, deterioro, contaminación o privatización pone en riesgo la calidad de vida de todos los habitantes de la metrópoli.
“Hoy en día, de manera totalmente irregular, los espacios públicos están perdiendo terrenos, ya sea porque utilizan parte de los mismos como equipamiento urbano para construir vasos reguladores, desarrollos urbanos, vialidades internas para favorecer desarrollos inmobiliarios, macrolibramientos o acuarios”, señalaron al dar lectura al pronunciamiento con el que inician esta organización vecinal que pretende hacer un frente común para cuestionar y revertir los proyectos gubernamentales.
Como ejemplos de los daños que se han causado a parques y áreas naturales, recordaron que en la colonia Arcos de Guadalupe, en Zapopan, las distintas administraciones municipales permitieron que el Club Carneros de futbol americano se adueñara de un parque público que después vendió y hoy se ha convertido en un centro comercial con torres de departamentos.
Señalaron que en los parques San Rafael y El Dean, ambos en Guadalajara, tanto el ayuntamiento como el Sistema Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado (dependiente del gobierno del estado), realizan obras de infraestructura que han dañado más de un centenar de árboles y mantos freáticos.
Indicaron que en Tonalá han resistido por más de dos años contra el proyecto turístico Yolkan, que pretendía la construcción de un centro de exhibición de artesanías en el Cerro de la Reina.
En Tlaquepaque denunciaron el desacato de la administración municipal ante la suspensión definitiva otorgada por el Juez Sexto de Distrito en Materia Administrativa y de Trabajo para detener obras y entrega de permisos de construcción en 132 hectáreas del Cerro del Tesoro, único espacio verde de origen volcánico dentro del anillo periférico de la ciudad e importante zona de recarga acuífera.
Por lo anterior, solicitaron a los legisladores adecuar las leyes para mejorar los mecanismos de protección de estos espacios y exigieron a los gobiernos municipales y estatal incluir efectivamente las opiniones de vecinos, usuarios y expertos técnicos antes de realizar cualquier tipo de proyecto dentro de estos espacios o sus áreas de influencia.
afcl