Tras la aprobación para reestructurar la deuda pública del estado, el presidente municipal de Veracruz, Ramón Poo Gil confió que el gobierno del panista Miguel Ángel Yunes Linares pague los adeudos a los ayuntamientos.
El alcalde de una de las ciudades más importantes del estado, afirmó que se espera que la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan) entregue 340 millones de pesos al ayuntamiento de Veracruz, recursos que están pendientes de transferirse a las arcas municipales desde ejercicios fiscales anteriores.
Entrevistado durante la ceremonia por el LXXIX Aniversario de la Expropiación Petrolera, reveló que el gobierno estatal solicitó al ayuntamiento el listado de los recursos que no se entregaron en años anteriores con la finalidad de que se confirme con los registros con los que cuenta la dependencia estatal.
“Personal de la Secretaría de Finanzas del Gobierno del estado ha solicitado formalmente al ayuntamiento de Veracruz el listado de los adeudos que se tienen para poder, uno, para tenerlos más identificados sobre todo hacer una compulsa de qué es lo que tiene la Secretaría de Finanzas y el ayuntamiento de Veracruz”, expresó.
Detalló que los recursos sin entregar a las arcas municipales están destinados para obras, planes y acciones que demanda la ciudadanía y detalló que 33 de los 340 millones de pesos corresponden al Fondo para la Infraestructura Social Municipal.
Explicó que los 340 millones de pesos pendientes de entregar al ayuntamiento porteño incluyen recursos del Fondo Metropolitano (Fometrop).
En ese sentido, dijo que el total de los recursos pendientes de entregar por parte del gobierno estatal podría reducirse en el caso de que no se reconozca el Fometrop.
“Ya contando el Fometrop, que es un fondo que asigna el Presupuesto de Egresos de la Federación (…), ya contando los proyectos que están integrados en la Secretaría de Finanzas, que tienen que ser aprobados por la Secretaría de Hacienda, sería un monto de 340 millones de pesos si y solo sí se aprueba la asignación del Fondo Metropolitano”, remató.
Ayer viernes, el pleno del Congreso finalmente autorizó al gobernador Miguel Ángel Yunes la reestructuración de la deuda pública que heredó de los últimos tres mandatarios priistas y que asciende a los 46 mil millones de pesos.
Con 38 votos a favor, 12 en contra (Morena) y cero en abstenciones, los legisladores dieron luz verde para renegociar los 21 contratos bancarios y bursátiles que ahogan las finanzas estatales.
De acuerdo con el Registro Público único de Financiamientos y Obligaciones de Entidades Federativas y Municipios de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, al 31 de diciembre de 2016, Veracruz tiene 21 obligaciones financieras constitutivas de deuda pública que reportan saldo por la cantidad de 41 mil 529 millones de pesos.
Se trata de cinco emisiones bursátiles por más de 12 mil millones de pesos y 16 créditos bancarios por 29 mil millones de pesos con Bajío Crédito, Banobras, Banamex, Multiva, Santander, Inbursa y Interacciones.