El pleno del Congreso de Veracruz, finalmente autorizó al gobernador Miguel Ángel Yunes Linares la reestructuración de la deuda pública que heredó de los últimos tres mandatarios priístas y que asciende a los 46 mil millones de pesos.
Con 38 votos a favor, 12 en contra (Morena) y cero en abstenciones, los legisladores dieron luz verde para renegociar los 21 contratos bancarios y bursátiles que ahogan las finanzas estatales.
De acuerdo con el Registro Público único de Financiamientos y Obligaciones de Entidades Federativas y Municipios de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, al 31 de diciembre de 2016, Veracruz tiene 21 obligaciones financieras constitutivas de deuda pública que reportan saldo por la cantidad de 41 mil 529 millones de pesos.
Se trata de cinco emisiones bursátiles por más de 12 mil millones de pesos y 16 créditos bancarios por 29 mil millones de pesos con Bajío Crédito, Banobras, Banamex, Multiva, Santander, Inbursa e Interacciones.
Adicionalmente a las 21 obligaciones financieras, el mismo Registro tiene inscritas otras siete operaciones que, si bien no reportan saldos en la columna correspondiente, si implican compromisos contractuales para el Estado de Veracruz por seis mil millones de pesos.
El voto de los legisladores se destrabó luego de que la secretaria de Finanzas y Planeación, Clementina Guerrero García, acudió al Congreso a explicar personalmente sobre las condiciones de contratación de este esquema.
Yunes Linares expresó su reconocimiento a las diputadas y diputados que votaron a favor del Decreto que le autoriza a iniciar la renegociación de la deuda pública heredada de administraciones anteriores.
Reiteró que no se trata de contratar nuevos créditos, no es más deuda, por el contrario, es bajar las tasas de interés y lograr un plazo más largo para el pago de esas obligaciones.
Manifestó también que el proceso se llevará a cabo con plena transparencia; cualquier ciudadano desde su computadora podrá revisar en la página de la Secretaría de Finanzas y Planeación los avances, los compromisos que se adquieran, los ahorros que se logren y el destino de los recursos.
El coordinador de los diputados del PAN, Sergio Hernández Hernández, relató el artículo que obliga a la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan) a transparentar el gasto de los remanentes que se generen con la reestructuración, pues dijo que con ello fue que se lograron acuerdos.
“Hoy no debe de ganar ningún grupo legislativo, hoy no debe de ganar el Poder Ejecutivo, hoy deben de ganar los veracruzanos”.
Por su parte, el coordinador del grupo legislativo del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Juan Nicolás Callejas Roldán, consideró que la reestructuración del estado no es suficiente para resolver la problemática del estado, pues aseguró que es necesario un plan de ajuste y contención de los gastos de la administración estatal.
Dijo que tras el análisis del nuevo proyecto enviado por le gobernador Miguel Ángel Yunes Linares, los diputados tricolores consideran que la medida intenta dotar de viabilidad financiera a través de la reestructuración y por ello votaron a favor.
El coordinador de la bancada de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Amado Cruz Malpica, afirmó que votaron en contra porque el dictamen es "esencialmente" el mismo y solo se le hicieron modificaciones "cosméticas para que los nuevos convencidos no se vieran tan mal de aprobar lo que no aprobaron el martes".
"No se lograron salvar los vicios de fondo (...) siguen sin aparecer datos sólidos y cálculos que fundamenten financieramente la iniciativa y dictamen, persiste opacidad y opacidad en el manejo de las finanzas públicas. Lo que cambió en 24 horas no fue el dictamen sino la oposición del PRI".
Cuestionó que en el nuevo dictamen no se especifican las tasas de interés que se deberán pagar, los abonos a capital, y solo aumentaron situaciones que ya son obligaciones del Gobierno del estado.
En su posicionamiento, el diputado independiente Sebastián Reyes Arellano señaló que su voto a favor de la reestructuración de la deuda está basado en la incapacidad de pago del Gobierno del estado.
Al hacer uso de la tribuna, el diputado de la fracción mixta "Juntos por Veracruz", Fernando Kuri Kuri, justificó el cambio del voto de su bancada al señalar que el Gobierno actual entendió que debe lograr los consensos a través de la transparencia y no de la amenaza.
"Parece que este Gobierno de oídos sordos entendió que lo más importante es tener diálogo para gobernar como Dios y la Constitución manda. Acaso no era más sano ajustar el presupuesto estatal y luego proyectar la reestructura"
Al fijar el posicionamiento de los legisladores del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), Francisco Martínez reconoció que al Ejecutivo solo le faltó amenazar a los diputados con "despedirlos" del trabajo, con tal de que aprobaran el refinanciamiento de la deuda.