Más Información
Sheinbaum se reúne con Lemus; “trabajar al estilo jalisco es en coordinación con la federación”, expresa gobernador
Marko Cortés difunde infografía a favor de denominar terroristas a cárteles; el “primer paso es reconocerlo”, dice
Activistas rechazan colocación de cámaras trampa para fauna en Tren Maya; piden retirar mallas metálicas que obstruyen su paso
Revés al INE, juez niega retirar suspensión definitiva a reforma judicial; da 48 horas para acatar sentencia
El ataque a policías comunitarios del municipio de Coahuayana, Michoacán, que derivó en un par de enfrentamiento a tiros, dejó como saldo un presuntos criminal muerto y cuatro habitantes lesionados que quedaron entre el fuego cruzado, informó la Procuraduría General de Justicia de Michoacán.
A través de un comunicado, la Procuraduría informó que la Fiscalía Regional inició la carpeta de investigación con relación a los hechos de este martes en la cabecera municipal de Coahuayana.
Detalló que personal de la Unidad Especializada en la Escena del Crimen acudió a la avenida Constitución y la salida hacia Zapotán, de la población de Coahuayana, lugar en donde se localizó el cuerpo sin vida de una persona del sexo masculino y junto al cadáver se encontró un arma de fuego.
De acuerdo con los datos recabados hasta el momento, el muerto accionó un arma de fuego en contra de varias personas y en el momento que pretendía abordar un vehículo cayó, sufriendo una muerte inmediata.
En el lugar resultaron heridos José Miguel L., José Isabel G., Antonio F., y Fernando Escalera, quienes fueron canalizados a diferentes nosocomios para su atención.
El ahora occiso, hasta el momento no identificado, fue trasladado al Servicio Médico Forense para que se le practique la necropsia de ley y determinar la causa de la muerte.
Por su parte, Porfirio Mendoza Zambrano, alcalde de Coahuayana, informó que en el ataque perdieron la vida seis personas y cinco más resultaron heridos.
Explicó que el ataque de personas fuertemente armadas con fusiles de asalto y encapuchadas -provenientes de la comunidad de Cerro de Ortega, Colima- en contra de los comunitarios inició sobre la Avenida Constitución, donde los ex autodefensas alcanzaron a repeler la agresión.
Mendoza Zambrano señaló que la persona fallecida esta identificado con una célula del grupo criminal “Los Caballeros Templarios” que operan en el estado de Colima; mientras que cinco pobladores de una comunidad indígena de Coahuayana fueron alcanzados por los disparos de los delincuentes.
Tras el atentado los ex autodefensas persiguieron a los criminales hasta el crucero con Boca de Apiza donde al darles alcance se registró un segundo choque a balazos que dejó cinco templarios más muertos.
El alcalde indicó que los criminales ingresaron a Coahuayana en dos camionetas: una quedó baleada en el primer encontronazo y la otra sobre la carretera 200 Lázaro Cárdenas-Manzanillo.
Habitantes de Coahuayana y autoridades de ese municipio denunciaron que a pesar de que ahí se encuentran destacamentado 36 elementos de la Policía Militar, éstos no acudieron a la llamada de auxilio y en apoyo a los policías comunitarios.
Incluso denunciaron que los militares se negaron a brindarles el apoyo a las autoridades locales para trasladar a un hospital de Colima a los lesionados, quiénes hasta esta hora no han podido ser atendidos, a falta de seguridad que escolte la ambulancia.
Desde el pasado 17 de febrero, EL UNIVERSAL dio a conocer mediante un reportaje que los templarios insistían en recuperar el territorio que por al menos 12 años controlaron en ese municipio colindante con el estado de Colima.
Lo anterior fue expuesto por Héctor “Teto” Zepeda, líder de las autodefensas de Coahuayana, que habían contenido, hasta hoy, a los templarios que huyeron hacia el estado de Colima, su peligroso lindero territorial.
“Pues allá están en El Chanal, Colima; allá es donde los alojó el gobernador de ese estado (Mario Anguiano Moreno) a todos los desplazados de los templarios, los que huyeron de aquí cuando inició el movimiento de autodefensas: el Carmelo y el Honorio Núñez Vargas (‘El Siete y el Cinco’ respectivamente) y Federico González Medina “El Lico” quien fue expulsado junto con sus sicarios y toda su familia de delincuentes”, recordó Héctor Zepeda.
El mapa desclasificado de presencia dominante de los cárteles mexicanos, publicado en abril del 2015 por la Administración para el Control de Drogas de los Estados Unidos (DEA por sus siglas en inglés) advierte que el grupo hegemónico en Colima era justamente en ese entonces el de Los Caballeros Templarios.
Se buscó a las autoridades de la Procuraduría de Colima para que dieran su versión sobre el alojamiento de templarios en esa entidad y no respondieron; sin embargo, reportes periodísticos de ese estado, indican que en ese mismo año, el comandante de la XX Zona Militar, Francisco Ortíz Valadez, dio a conocer en el marco de una detención de civiles armados, que una parte de éstos aceptó pertenecer a los templarios.
Hace tres años, “Teto” encabezó el levantamiento en armas de ese municipio, tras el asesinato de su hermano el 13 de enero del 2014, y actualmente dirige la policía comunitaria.
Este cuerpo de policía (ex autodefensas) habían mantenido la seguridad de su municipio y logrado evitar que regresen los asesinatos, secuestros, extorsiones y desapariciones forzadas; sin embargo, este martes fueron atacados nuevamente por los todavía existentes Caballeros Templarios.
afcl