La madrugada del martes, un grupo delincuencial abandonó los cuerpos de 11 personas en calles del municipio de Boca del Río; los restos de nueve hombres y dos mujeres presentaban huellas de tortura.
Ocho de los cadáveres se encontraban en el interior de una camioneta, mientras que tres más estaban en la puerta de la misma unidad, además se localizaron dos narcomensajes.
Éste no es un fenómeno nuevo en la entidad, ya que en febrero se registraron otros dos hallazgos: uno en el municipio de Nogales y otro en Cosamaloapan.
El pasado 2 de febrero en Nogales, Veracruz, se hallaron ocho personas dentro de una camioneta tipo Van, marca Chevrolet; uno de ellos portaba un uniforme apócrifo de la Policía Federal.
Mientras que el día 19 se localizaron cinco cuerpos a un costado de la autopista La Tinaja-Cosoleacaque, en el kilómetro 99+500, a la altura del puente Tesechoacán, en el municipio de Cosamaloapan.
Además, en octubre del año pasado, seis cuerpos fueron abandonados dentro de una camioneta, a orillas de la carretera estatal Isla-Santiago Tuxtla, a la altura del Puente La Ceibilla. Todos presentaban signos de tortura.
Este modus operandi (abandonar cadáveres en vehículos) se remonta al año 2011, cuando el 20 septiembre 2011, 35 cadáveres fueron abandonados en dos camionetas sobre el bulevar Adolfo Ruiz Cortines, frente a Plaza Américas de Boca del Río, Veracruz.
En ese momento la versión oficial apuntó que se trató de hechos relacionados al grupo delictivo “Los Zetas”. La mayoría de los cadáveres correspondían a jóvenes de entre 15 y 28 años de edad.
Durante los años siguientes se presentaron hechos similares, ya que en 2012, 14 cadáveres se encontraron en una camioneta de redilas abandonada en la carretera federal Álamo-Potrero del Llano, colindante con Tamaulipas.
En 2013, en el municipio de Alvarado reportaron el hallazgo de siete cadáveres semienterrados en un predio baldío ubicado en Playa La Cava; presentaban huellas de tortura.
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