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El ex secretario de Seguridad Pública de Veracruz, Arturo Bermúdez Zurita, uno de los hombres más cercanos al ex gobernador Javier Duarte de Ochoa, fue detenido e internado en el penal de Pacho Viejo, acusado del presunto delito de enriquecimiento ilícito.

Bermúdez Zurita fue arrestado cuando acudió a juzgados de Pacho Viejo, asentado a 15 kilómetros de la ciudad de Xalapa, a una audiencia de un proceso que se le sigue por otros dos delitos que se le imputan por irregularidades en su desempeño.

Fueron elementos de la Policía Ministerial, bajo el mando del fiscal general del Estado, Jorge Winckler, quienes le notificaron que existía una orden de aprehensión en su contra derivada del proceso penal 13/2017 y de la carpeta de investigación número FGE/FIM/C.I/068/2017/XII.

El temido y poderoso Bermúdez Zurita, quien formó parte del primer equipo de Duarte de Ochoa, prófugo de la justicia señalado de los presuntos delitos de delincuencia organizada y lavado de dinero, fue escoltado, sin ser esposado, a la penitenciaría.

Más tarde, el ex funcionario y su defensa renunciaron al término de 72 horas que otorga la ley para presentar pruebas, por lo que la noche del viernes presentó documentación ante el Juez de Control para que definiera su situación legal.

Bermúdez fue titular de Seguridad de 2011 a 2016 y en noviembre pasado, un juez de Control lo declaró como imputado, al considerar que había elementos suficientes para iniciar un juicio por los presuntos delitos de tráfico de influencias y abuso de autoridad.

La autoridad judicial le impuso una garantía económica de un millón de pesos y le prohibió salir del país al ser señalado de autorizar indebidamente la prestación de servicios para la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) y aprovechar su relación de negocios con el empresario Roberto Esquivel.

Según diversas investigaciones, el ex jefe policiaco y su familia estarían ligados a 21 empresas y ocho prestanombres. En la lista se incluía una residencia en Woodlands con valor aproximado a 5 millones 800 mil pesos y una segunda residencia con valor de casi 16 millones y medio de pesos.

Las indagatorias descubrieron que en diciembre de 2012 su esposa, Sofía “N”, presuntamente adquirió otra casa por casi 10 millones de pesos; un supuesto sobrino, Jesús “N”, presuntamente adquirió una propiedad por 6 millones 734 mil pesos, y el hermano del ex funcionario, Miguel Ángel “N”, compró una residencia por 6 millones 364 mil pesos.

Las autoridades señalan como “socio” de Bermúdez al empresario Roberto “N”, quien al parecer adquirió un terreno de Woodlands (Texas) por 6 millones 123 mil pesos.

Durante la gestión de Bermúdez al frente de la SSP hubo un incremento en el número de personas desaparecidas, pues llegaron a contabilizarse 5 mil 590 denuncias, de las cuales en 3 mil 278 casos aparecieron las personas vivas o muertas.

Y en los últimos cuatro años del gobierno de Duarte, autoridades estatales y federales iniciaron investigaciones por un total de 145 casos de “desapariciones forzadas”, es decir, donde presumiblemente están involucrados agentes policiacos de diversos órdenes de gobierno.

De acuerdo con documentos de la Fiscalía General del Estado y de la Procuraduría General de la República, “se trata de 87 casos del fuero común y 58 federales donde se indaga la participación de oficiales del Estado en la desaparición de personas”.

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