Un grupo de 500 policías militares arribaron la noche del martes al estado para reforzar a las corporaciones policiacas. Los principales puntos de operación serán los municipios de Tecomán y Manzanillo, considerados los más violentos de la entidad.
Desde octubre de 2015 la escalada de crímenes ha sido constante en Colima, sitio que, de acuerdo con datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, cerró el año pasado con 600 homicidios dolosos, lo que equivale a una tasa de 81.55 asesinatos por cada 100 mil habitantes, la mayor del país.
Del total de homicidios registrados en 2016 en Colima, 193 ocurrieron en Tecomán y 177 en Manzanillo.
Tan sólo en enero del presente año ocurrieron 78 homicidios dolosos en la entidad, 11 casos más en comparación con los reportados el mes pasado (diciembre de 2016) y cuatro más que los registrados en abril, reportado como el mes más violento de 2016.
El comandante de la 20 Zona Militar, Celestino Ávila Astudillo, informó en conferencia de prensa que la base de operaciones de este grupo estará en el municipio de Tecomán.
Sin plazo definido. Aunque señaló que la intención es mejorar en poco tiempo la situación de inseguridad por la que atraviesa la entidad, no precisó el periodo que permanecerán desplegados estos elementos.
Las tarea concreta que realizarán, dijo el mando militar, será el patrullaje de zonas conflictivas y rutas por las que se tienen detectados los traslados de grupos delictivos.
Eduardo Emilio Zárate Landeros, comandante de la Quinta Región Militar, aseguró por su parte que el trabajo de los elementos castrenses podría extenderse a los municipios de Armería y Colima si se considera necesario.
Opinó que la sola coordinación entre los militares y las corporaciones de seguridad del estado hará que los índices delictivos bajen y se recupere la percepción de seguridad en la entidad.
Durante una reunión de trabajo con los diputados locales, el secretario de Seguridad Pública de Colima, Francisco Javier Castaño Suárez, refirió que el trabajo de los militares también tendrá que ver con labores de inteligencia y está tratando de llegar a un acuerdo para que brinden cierta capacitación.
Explicó a los legisladores que los altos índices en el rubro de homicidios dolosos tiene que ver con una disputa abierta por el control territorial entre el Cártel de Jalisco Nueva Generación y el Cártel de Sinaloa. Castaño indicó que aunque no se ha logrado contener el tema de los homicidios dolosos, hay otros delitos de alto impacto que se mantienen bajos, por lo que insistió en que la violencia está vinculada a la disputa entre cárteles.
Además, habló de la posibilidad de mejorar algunas condiciones laborales de los policías.