Torreón.— José Luis Rodarte González, de 46 años, llegó enfundado en su uniforme de despachador de gasolina hasta la protesta y toma de las instalaciones de Recaudación de Rentas en Torreón. Llegó porque, dijo, ya se cansó de “trabajar como burro para pagar impuestos”.

Desde las 08:30 horas, José Luis se unió a los 50 manifestantes que reclamaban el aumento en la gasolina. Tiene una motocicleta y contó que antes gastaba 139 pesos en 10 litros de combustible y ahora son 162 pesos.

“Es exagerado para uno que gana el mínimo. Estamos pague y pague, ya no podemos. Un taxista, un tortillero, un panadero, no vamos a poder”, comentó. José Luis no sólo reprochó el aumento de los combustibles, sino que aprovechó para enlistar la serie de impuestos que, aseguró, lo están ahogando.

“Yo gano el salario mínimo”, refirió. “Tengo un Nissan 1998 y tengo que pagar mil 160 pesos por derecho vehicular y otras aportaciones estatales. Es demasiado dinero para un carro, es un vil robadero”.

Mencionó que con la anulación de la tenencia estatal, únicamente disminuyó 800 pesos el recibo. Para este año, el gobierno de Coahuila decidió eliminar la tenencia estatal.

Sin embargo, como gana el mínimo como despachador de gasolina, realiza trabajos como mensajero en su motocicleta, donde ahora, afirmó, el estado le quiere cobrar más por las placas del vehículo.

“El año pasado pagué 364 pesos de tenencia y placas. Quieren que pague ahora 385 pesos. Quieren que pague laminado y todo lo demás. Me están dando de baja cuando yo no la estoy dando de baja. Quieren que paguemos a la fuerza cada año placas en motos y es un gasto”, criticó.

Los impuestos no se reflejan. José Luis mantiene un hijo y recalca que trabaja todo el año para para pagar sus impuestos. “A inicios de año fui a pagar el drenaje sanitario, el predial, la basura y el pavimento, todos son impuestos municipales. El pavimento lo subieron de 117 pesos, que pagué el pasado año, a 259 pesos”.

Refirió que está de acuerdo en pagar impuestos, mas no exagerados. Además, criticó que pese siguen pagando impuestos, los mismos no se reflejan en un mejor nivel de vida. “Tenemos años sin que nos pavimenten, sin que nos parchen”, ejemplificó. “Me gustaría que anduvieras en la moto repartiendo para que veas cómo me queda la cintura de tanto pozo, en mi carro ya van dos veces que golpeo los rines y me cuesta arreglarlo; 200 pesos por cada rin, las llantas boludas, agarren la onda. Inviertan bien nuestro impuesto”, reclamó.

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