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Tras la toma de protesta de Donald Trump como presidente de Estados Unidos, el gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat Hinojosa, pidió no especular sobre las deportaciones masivas anunciadas por el mandatario en su campaña política ni crear zozobra o generar escándalos.
“Pediría que no caigamos en ese supuesto todavía, habrá que esperar; los números históricos que tenemos nos refieren que no debe esperarse una deportación masiva, pero estamos listos para cualquiera de los supuestos; Oaxaca está listo para hacer equipo con nuestros paisanos, los que decidan regresar”, dijo.
Luego de un acto público en la zona conurbada de la capital, aseveró que mantiene estrecha comunicación con la Secretaría de Relaciones Exteriores y a través de ella con los consulados mexicanos en esa nación norteamericana, a fin de apoyar a los connacionales en caso de que enfrenten dificultades.
Evitó adelantar si su gobierno promoverá algún boicot en contra de productos o servicios de compañías norteamericanas y dijo que la próxima semana hará un anuncio al respecto.
“No hay ninguna alerta (por las probables deportaciones); no hay que caer en una situación de escándalo, estamos listos con una política pública inteligente, como la hemos tenido, pero estoy a la expectativa, con las previsiones necesarias para poder mantener una relación de respeto con los Estados Unidos”, manifestó.
Murat Hinojosa añadió que si llegaran a expulsar masivamente a los mexicanos, que representan aproximadamente 40 millones de personas, podría colapsar la economía norteamericana.
ÚNICA PROTESTA
Por otra parte y en su tercer día de protesta en la capital, militantes de la organización Red Internacional de Indígenas Oaxaqueños (RIIO) efectuaron por la mañana una marcha por las calles de la capital y una protesta en la sede del consulado de los Estados Unidos.
En la calle Macedonio Alcalá del Centro Histórico, cerca del Centro Cultural Santo Domingo, los manifestantes colocaron lonas y cartulinas de repudio a Donald Trump.
De acuerdo con su dirigente, Adolfo Gómez Hernández, los más perjudicados serían los oaxaqueños que habitan en las regiones Mixteca y Valles Centrales, mayores expulsoras de mano de obra, y zonas en las que no hay oportunidades de empleo ni desarrollo.
Pidió también al gobierno federal y al estatal impulsar políticas y programas para apoyar las comunidades más marginadas del estado. Después de casi dos horas, los inconformes retornaron a sus pueblos de origen.
lrs
