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La designación de Wilbur Ross como secretario de Comercio de Estados Unidos presenta un escenario ríspido de renegociación del TLCAN, de buscarse la modernización del acuerdo.
Con Ross se vislumbra “una negociación complicada, ruda, porque son populistas de derecha y muy cerrados”, aseveró la directora de LMM Consulting, Luz María de la Mora.
El problema es que se están tomando decisiones poco racionales, populistas, mercantilistas y siguiendo parte del discurso de campaña de Donald Trump, dijo.
Dan DiMicco, quien se perfila como asesor comercial de Estados Unidos, puede ser un respiro para la causa mexicana porque viene del sector acerero y su amenaza es China, y puede tener una perspectiva más balanceada.
Para el investigador de la UNAM, Enrique Dussel, el gobierno mexicano debe aprender a negociar no sólo con un discurso técnico, sino incorporar un discurso político, porque los argumentos de Trump son populistas y “meramente políticos”.
“Si no preparamos un argumento político y otro técnico, vamos a perder. [Trump] No quiere que Estados Unidos tenga más inversiones en México ni que se generen más empleos en territorio mexicano”.
Barreras. La desarticulación de las cadenas productivas y las barreras comerciales contra productos agrícolas ha sido una constante en los más de 22 años de vigencia del TLCAN.
Uno de los grandes beneficiarios del acuerdo es China, porque México dejó de producir bienes intermedios y los ellos se convirtieron en proveedores, explicó el director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico, José Luis de la Cruz.
El Banco de México informó que el país exportó 308 mil 890 millones de dólares a Estados Unidos en 2015 e importó 186 mil 802 millones, pero se importaron de China 69 mil 987 millones en productos y sólo se exportaron bienes por 4 mil 873 millones.
Entre los agroproductos ganadores del TLCAN destacan la cerveza, tequila, jitomate, aguacate, carne de res y berries, lo que convirtió a la industria agroalimentaria mexicana en la tercera fuente de divisas más importante, dijo el presidente del Consejo Nacional Agropecuario, Benjamín Grayeb.
Según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), México dejó de ser autosuficiente en maíz, el producto de mayor consumo entre su población, y Estados Unidos se convirtió en el principal proveedor, además de cebada, trigo y arroz.
En tanto, las exportaciones de México al país vecino se concentraron en tomates frescos, pepino, cítricos, brócoli, uvas, melón y sandía.
Aun y cuando son de los productos que más se exportan a ese país han sido objeto de barreras no arancelarias por parte de la autoridad estadounidense. Por ejemplo, México tiene dos acuerdos con Estados Unidos con el que se evitó que le impusieran cuotas compensatorias a los jitomates frescos y al azúcar, porque los productores de dicho país acusaron de la existencia de subsidios y de que se vendían por debajo del precio real.