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Cuauhtémoc Blanco Bravo sigue siendo presidente municipal de Cuernavaca y aunque el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Morelos lo sancione con la separación del cargo, el edil todavía puede recurrir a los tribunales federales para impugnar el juicio político en su contra aprobado por los diputados porque se violó el principio del debido proceso.
El presidente de la Barra de Abogados del Estado de Morelos, Miguel Ángel Rosete Flores, explicó lo anterior y dijo que el fallo del Congreso local, de votar procedente el juicio político contra el edil y enviar el expediente al TSJ a efecto de sancionarlo, le brinda la posibilidad de recurrir al justo y debido proceso. Explicó que en la reforma a la Constitución en el año 2011 se inscribió que todos los acusados tienen esa garantía, como sucedió en los casos de la ciudadana francesa Florence Cassez y el narcotraficante Rafael Caro Quintero.
“La violación expresa se encuentra en el artículo 16 de la Ley Estatal de Responsabilidades de los Servidores Públicos, donde dice que el denunciado tiene un plazo de 15 días hábiles, contados a partir del día siguiente que surte efecto la notificación, para contestar los hechos que se le imputan. En caso de aportar pruebas se señalará fecha para el desahogo de las mismas, por lo tanto hay una violación flagrante al procedimiento”, explicó.
Precisó: “En el juicio político contra el ex gobernador Jorge Carrillo Olea, en 1998, los diputados tardaron ocho meses. En el proceso contra Sergio Estrada Cajigal (2000-2006), cuatro meses, aunque él fue protegido por la Corte. En el caso de Blanco Bravo se tardaron cinco días hábiles”, precisó. “Las posibles sentencias contra el edil son la destitución, inhabilitación, imposición de una multa o la amonestación, por incumplir con los requisitos de elegibilidad para ser alcalde, pero en este caso”, dijo Rosete Flores, “los diputados lo están volviendo a enjuiciar por la misma causa, a pesar de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) le otorgó una suspensión hasta en tanto resuelve si es constitucional o no el señalamiento”.
La noche del jueves la mayoría de los diputados votaron en favor del juicio político contra Blanco y lo acusaron, asimismo, de recibir en donación obra pública sin la autorización del Cabildo municipal.
Los diputados acordaron remitir el expediente al TSJ, pero hasta la tarde de este viernes la mayoría de los magistrados no habían sido convocados a sesión. Tanto el Congreso de Morelos como el Poder Judicial concluyeron con sus trabajos ordinarios e iniciaron su periodo de vacaciones.
Por la mañana se registraron protestas de un grupo de comerciantes afines al edil de Cuernavaca. En el ayuntamiento desalojaron a los trabajadores administrativos y después ocuparon el inmueble. Luego ingresaron policías para tomar el control del inmueble. Otro grupo de comerciantes realizó protestas en el TSJ y en el Consejo de la Judicatura. También arrojaron huevos en el PRD estatal porque acusaron que el dirigente local Rodrigo Gayosso Cepeda, hijastro del gobernador Graco Ramírez, esté detrás del movimiento político para destituir al edil.
En una entrevista radiofónica con Joaquín López Dóriga, el ex futbolista dijo que Gayosso Cepeda —hijo de Elena Cepeda, esposa de Graco Ramírez— pretende deponerlo del cargo para después, en tres o cuatro meses, buscar la gubernatura del estado.
El secretario del ayuntamiento, Guillermo Arroyo Cruz, denunció que un grupo de regidores y la síndico municipal Denisse Arizmendi pretendían sesionar para desconocer a Cuauhtémoc Blanco como edil y tomar protesta al suplente Juan Manuel Hernández Limonchi. Por la noche el regidor del Partido Socialdemócrata (PSD), Eduardo Bordobave Zamora, al finalizar la sesión de Cabildo, dijo que TSJ ordenó al alcalde evite salir del estado como medida precautoria, en tanto se revisa el juicio político. Minutos después, el alcalde anunció que planeaba ponerse en huelga de hambre al interior de la Catedral de Cuernavaca.