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Morelia.—A partir de hoy se normalizará la actividad académica para los cerca de 55 mil alumnos de los diferentes niveles de estudio de la Universidad Michoacana, luego de que integrantes del Movimiento de Aspirantes y Rechazados —apoyados por comuneros indígenas y normalistas— liberaran las instalaciones de Ciudad Universitaria, tras 65 días de paro en las facultades y demás instalaciones de la máxima casa de estudios.
Los paristas, que en su mayoría reprobaron el examen de admisión para este ciclo escolar (2016-2017), exigían cerca de 750 lugares, principalmente en las carreras relacionadas con la salud.
De acuerdo con el rector Medardo Serna González, el Consejo Universitario no cedió espacios a los rechazados a cambio de que liberaran Ciudad Universitaria y las seis facultades ubicadas afuera de ese campus.
Al realizar un recorrido por las instalaciones, Medardo Serna aseguró que uno de los ofrecimientos hechos a los inconformes fueron cursos de regularización para que puedan salir mejor calificados en el próximo examen de admisión.
Agregó que otras de las ofertas fue el ingreso de los paristas a educación continua, a través del departamento de idiomas, para que puedan tener derecho a un espacio y alimentación en las casas del estudiante. “La Universidad Michoacana está ofreciendo todo lo que está a su alcance a los aspirantes que no pudieron estar en esta ocasión en alguna de las carreras de su interés”, resaltó.
A pesar del registro de la destrucción de equipo, de las instalaciones de algunos edificios, salones de clases y laboratorios, el rector de la UMSNH señaló: “hay daños menores, por lo que debemos implementar de inmediato un trabajo de mantenimiento.”
Además, Serna González señaló que las supuestas órdenes de aprehensión —que dijo había en contra de algunos manifestantes— han quedado atrás a fin de no complicar más la relación entre los rechazados y las autoridades.
“Esta liberación se basó en el diálogo, en la negociación, en la conciliación y eso lo debemos resaltar, porque uno de los valores de la Universidad es precisamente la lógica del entendimiento”.
El pasado lunes 30 de octubre, moradores de la casa del estudiante “2 de Octubre” decidieron liberar las instalaciones de las facultades de Medicina, Químico Fármaco Biología, Veterinaria, Enfermería y Salud Pública, así como Derecho, que también mantenían tomadas desde que inició el conflicto.
Sin embargo, las instalaciones de Ciudad Universitaria permanecían cerradas por el Movimiento de Aspirantes y Rechazados, indígenas y normalistas que ahí se encontraban atrincherados con piedras, palos, machetes, artefactos de pólvora y explosivos de fabricación casera.
Durante su atrincheramiento, provocaron daños a los inmuebles de las cinco facultades; desde cristales rotos, destrucción de salones de clases y mobiliario, fue lo que se apreció al interior de los planteles educativos.
Las puertas de acceso también fueron dañadas por los rechazados, así como el equipo de cómputo y las cámaras de seguridad, reportaron trabajadores de servicios generales de la institución, responsables de la limpieza de los inmuebles.
La toma de la UMSNH afectó desde su inicio a cerca de 24 mil estudiantes universitarios de 20 de las 24 facultades con las que cuenta la casa de estudios nicolaíta.
Este conflicto dejó también una serie de enfrentamientos entre estudiantes universitarios que se vieron afectados en sus clases y el grupo de paristas, que cada vez hicieron más violentas sus protestas.