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Después de que EL UNIVERSAL dio a conocer la historia de Felipe Espinosa Tecuapetla, un hombre de 79 años que por el día estudia una Ingeniería en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) y por las tardes trabaja en la central de abasto y en el tianguis de Tepeaca, las reacciones en redes sociales se volcaron a favor del singular alumno, aunque no faltó quien intentó desanimarlo por su edad.
Tan sólo en Facebook más de 57 mil personas reaccionaron a la historia; 44 mil 734 utilizaron el icono de Me gusta, 9 mil 564, Me encanta, y 2 mil 615 usuarios, Me sorprende.
Además, más de 25 mil personas decidieron compartir el texto y las imágenes que dan cuenta del esfuerzo que realiza este adulto de la tercera edad, quien entró este año a la carrera de Ingeniería en Procesos y Gestión Industria, tras obtener más de 400 puntos en su examen de admisión y en el que participaron más de 450 aspirantes.
Asimismo, se registraron alrededor de mil 300 comentarios en la red, principalmente positivos: “Yo con 24 años me decían que ya era tarde para estudiar la carrera”, expresó el usuario Luis Ángel Carmona.
Algunos cibernautas generaron polémica y quisieron entablar un debate al hacer referencia a su edad. “Está bien que quiera estudiar pero... seamos realistas: a su edad nadie lo va a contratar y es una pérdida de tiempo no por el conocimiento sino por que a su edad ya no está para trabajar, más bien debe disfrutar y descansar o no?”, expresó un usuario, lo que derivó en la respuesta de otras personas que no dudaron en defender al alumno octagenario: “Yo creo que él sabe [eso] de sobra; es aún más admirable porque no busca sacar beneficio de ahí, [lo que es] admirable por su edad, alguien que no busque dinero joven es un mediocre. Pero yo creo q es una espinita q el tenia y lo está logrando se dio cuenta que si puede!” (sic).
“Es una forma de disfrutar la vida, Siendo realistas, a muchos jóvenes como tú ya es difícil que los contraten" (sic), señaló Reyna Alvirde.
Otra persona expresó: “Creo que estamos muy enfocados a lo material, antes debemos buscar ser felices con lo que hacemos, y a esa edad por lo general se piensa así, ‘ya para qué’, se nota que es una persona diferente, bien por el señor!!!! Es mejor hacer lo que se quiere, antes de estar ya en el lecho de muerte; ahí vendría el verdadero arrepentimiento” (sic).
Tampoco faltó quien intentó tomarlo con humor: “Acaba la carrera a los 85, hace su servicio y se titula a los 86, comienza a trabajar en ingeniería, se jubila al mes que lo dan de alta en el seguro”, lo que también provocó la respuesta de otros usuarios que tildaron el comentario de desafortunado, “iletrado”y hasta tonto.
La mayoría de los usuarios le enviaron bendiciones y lo tomaron como un ejemplo a seguir.
En tanto, en la red social Twitter la historia de don Felipe alcanzó cerca de 300 Me gusta y 154 retuits.
Espinosa Tecuapetla ingresó este año a la universidad poblana, ciudad en la que nació y siempre ha vivido. Comenzó a trabajar a los 16 años de edad y desde entonces no ha parado, salvo cuando tuvo un accidente que lo lleva casi a perder un pie. narra.
El hombre es viudo y tiene cinco hijos; uno de ellos, Antonio, es parte de sus motores en la vida y el único con el que mantiene contacto, quien también estudió ingeniería y vive en El Paso, Texas.