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Ciudad de México
En sus nueve años de vida, Purita sólo había viajado para someterse a tratamientos médicos que incluían inyecciones, vacunas y dolor. Pero el domingo emprendió un viaje en el que sólo hubo tiempo para la alegría, paseos, entrevistas y un sueño cumplido: conocer el Club América y a su portero favorito, Hugo González.
“En este viaje no hubo dolor, sólo alegría. Para mí, verla contenta me brinda paz, de saber que logramos el sueño que ella quería”, expresó emocionada la señora Claudia Gómez González, mamá de María Pura Porras Gómez, Purita, quien sufre epidermolisis bullosa distrófica recesiva, conocida de forma común como “piel de mariposa”.
Una enfermedad genética en la piel cuya característica es la formación de ampollas con el mínimo roce o sin roce aparente. Las superficies de la piel y de las membranas mucosas están cubiertas por ampollas y úlceras.
El domingo 23 de octubre, invitadas por la Fundación Televisa, Purita, su madre y su hermana, Indira Alcatraz, subieron al avión que las llevó a la Ciudad de México. Fueron 80 minutos en los que Purita fue la más emocionada de los pasajeros. Bromeó con su hermana y disfrutaba de lo que veía por la ventana.
—¿Qué fue lo que más te gustó del vuelo?
“Las nubes. Ver el cielo”, respondió.
A su mamá le contó: “Mami, yo siento que si me aviento en una nube voy a rebotar, se ven muy esponjosas”.
Al llegar fueron recibidos por personal de Fundación Televisa y se realizó el primer enlace en vivo para la página de Estados EL UNIVERSAL, en Facebook. La respuesta de los lectores fue muy emotiva, con muchas expresiones de afecto hacia la niña.
Pero lo que vivió el lunes 24 por la mañana superó lo que había imaginado.
El encuentro
Antes de salir a El Nido, durante el desayuno Purita reflejaba una felicidad que pocas veces le había visto su madre. Las tres vistieron sudaderas de su equipo de futbol preferido y la pequeña nunca paró de hablar. Era otra, sonreía, jugaba y bromeaba.
Cuando ingresaron a las instalaciones deportivas Purita ya iba muy emocionada, caminó entre los verdes campos de entrenamiento. Había muchos reporteros esperándola, junto a directivos del club.
El primero en salir fue Rubens Sambueza, “¡Sambu!”, le grita la señora Claudia y el jugador se acerca a intercambiar unas palabras con Purita, mientras le brinda su autógrafo.
El encuentro que la niña esperaba se logró minutos después, cuando vio a Hugo González. Toda la emoción de la niña se acumuló en su mirada al recibir su saludo. La espontaneidad que había mostrado se “congeló” ante su ídolo, sólo lo miraba y le sonreía.
El arquero, muy amable, caminó a su lado y le hizo preguntas para lograr una conexión. La señora Claudia lloraba e Indira hizo una transmisión directa por Facebook.
Purita era la estrella del momento. Javier Rojas, reportero de Televisa, les hacía preguntas; así como Daniel Blumrosen, de EL UNIVERSAL. “¿Vas a ver el partido del miércoles?, ¿vamos a ganar?”, le preguntó Hugo a la niña. “Sí, cuatro a cero”, le respondió con firmeza.
El entrenamiento matutino comenzó, pero nadie se movió del lugar, ya que volverían a convivir al final. Cuando apareció Ricardo Peláez, la señora Claudia, con lágrimas, le agradeció todas las atenciones recibidas. “Esta es su casa, cuando quieran venir”, les respondió.
Para realizar una entrevista también llegó un histórico del futbol americanista, Enrique Borja, quien las atendió con mucha sencillez. Al concluir el entrenamiento también le regalaron su autógrafo los jugadores Carlos Darwin Quintero, Oribe Peralta y el entrenador Ricardo Lavolpe.
“Cuando le hablé a Lavolpe pensé que no nos iba a hacer caso. Cuando volteó se sonrió con mi hija, le pedí la foto y le firmó la playera. Es considerado de carácter difícil, pero sí le arrancamos una sonrisa”, relató la madre de la pequeña.
Y volvió Hugo. Le obsequió un balón amarillo autografiado y su camiseta con el número uno. Ese balón la transformó. Regresó Purita con su sonrisa.
En agradecimiento, la niña le trajo desde Ciudad Victoria, Tamaulipas, una camisa del hombre araña con el logo: “Campaña por Purita”. “Me la pondré en el próximo partido”, le aseguró el portero, mientras posaba con su nueva camiseta. Era el final de un encuentro que soñó la familia.
“No lo puedo creer aún, qué bello sueño cumplido para mi niña, qué personas tan sencillas. Agradezco a la Fundación Televisa y a EL UNIVERSAL por todo esto que estamos viviendo”, expresó la señora Claudia de regreso al hotel.
Aunque habla poco, Indira también pasó el resto de la tarde emocionada.
¿Creíste que era muy difícil lograr tu sueño Purita?
“Sí, sabía que era muy difícil, pensé que no se podría”, le respondió al reportero ya entrada en confianza.
“Ha sido un milagro”
La experiencia continuó el martes a las 10:00 horas, con la visita a las instalaciones de EL UNIVERSAL. Se realizó una entrevista en vivo a través de Facebook. Desde que ingresó a las instalaciones del periódico, la niña recibió muchos saludos. Ya es muy conocida.
En la entrevista, Claudia González relató las adversidades que han enfrentado con la enfermedad, habló sobre los altos costos de los medicamentos y la lucha que enfrentan juntas para mejorar la salud de Purita.
“He malbaratado cosas mías para obtener recursos, también realizo bingos, rifas o boteamos en eventos, todo para conseguir dinero para los tratamientos de mi niña o los gastos para los viajes”, explicó.
Recordó cómo, a raíz de la cobertura del periódico, comenzaron a fluir los donativos de muchas partes del país:
“Ha sido un milagro, porque no había recursos ni para una vacuna más y nos hablaron del grupo Simsa para decirnos que pagan todas las vacunas de 2017 y además otro donador depositó 50 mil pesos para la cirugía reconstructiva de su mano derecha”.
Frente a las cámaras, explicó la forma en que, a través de la nueva operación, le van a separar los dedos de la mano a su niña:
“Le van a separar sus deditos y a injertar piel, después le pondrán medicamentos para regenerar su piel”, describe.
Envió un consejo para quienes atraviesan por situaciones difíciles, “Dios nunca nos abandona, siempre me levanto y digo gracias Señor, miren hacia arriba y díganle a Dios: aquí estamos, ten todos mis pesares y no los abandonará”.
Y de los recuerdos dolorosos pasaron a narrar la experiencia del lunes en el Club América. Madre e hija compartieron su pasión futbolera.
“Fue algo hermoso ver como trataron tan bonito a mi hija, al cumplir su sueño de conocer a Hugo González, pero no sólo a él, sino que se acercaron varios jugadores del plantel y su entrenador”, recordó la señora Claudia.
¿Entonces si fue un sueño cumplido?
“Claro que sí, este ha sido un viaje hermoso donde he visto muy feliz a mi hija. Generalmente viajamos para consultas y ella recibe vacunas, o biopsias y ahora todo fue alegría en Purita”.
Externan apoyo
A petición de la audiencia, la señora mostró los folletos que continuamente utiliza en su campaña a favor de Purita, en los cuales se comparten dos cuentas para realizar donativos:
Banorte 0588178586 y depósito saldazo Banamex en Oxxo 4766840180482999. También se pueden comunicar a la cuenta de Facebook personal de la señora Clau Gonzalez.
Al aire se leyeron los saludos y palabras de aliento de los lectores, como Guille Ivan Montoña, quien escribió, “que Dios los bendiga. Que madre tan valiente. Con la fe en Dios saldrán adelante”.
Carlos Romero expresó, “que Dios las bendiga”; George Loba mencionó, “mil bendiciones para ustedes”, y David Ramírez dijo: “Dios te proteja con su poder niña hermosa”, entre muchas otras muestras de ánimo.
“Gracias a todos ustedes, a quienes ya donaron y a quienes van a donar. Mil gracias a EL UNIVERSAL y a Fundación Televisa por este gran sueño que ha vivido mi hija”, comentó la señora Claudia.
Horas más tarde, a las 15:30 horas, antes de subir al avión de regreso a Ciudad Victoria, mientras Purita coloreaba una revista, expresó: “me gustó mucho el viaje mami, ya ni me quiero ir”.