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Luego de días de mesas de trabajo con funcionarios de la Secretaría de Educación estatal y otras dependencias de la entidad, maestros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (CETEG) retiraron el plantón que mantuvieron en el zócalo capitalino dos años y 10 días.
Desde las 10:00 horas, integrantes de la Coordinadora recogieron pertenencias como ollas de cocina, utensilios, libros, sillas, lonas y carpas, que desde que se instalaron el 8 de octubre de 2014 en demanda de la presentación con vida de los 43 desaparecidos de Ayotzinapa, formaban parte de la vista en la explanada.
Pastor Mojica Delgado, de la Comisión Política de la CETEG, dijo en conferencia de prensa que era una etapa más a su lucha; “no significa un repliegue total, no es la primera lucha, ni el primer levantamiento y todo llega a su fin”.
Dijo que “por acuerdo y estrategia tenemos que levantar el plantón y seguir como CETEG, estaríamos en contra si no siguiera eso, refrendando la presentación con vida de los 43, también el magisterio vivió violaciones, tenemos compañeros asesinados, desaparecidos, perseguidos".
Esta fracción minoritaria de la CETEG, integrada por docentes de la zona Centro, Costa Grande y una parte Acapulco, es representada por Antonia Morales Vélez, integrante también de la Comisión Política.
Ella mencionó que no pactaron con el gobierno ni los amenazaron con desalojarlos, pero sí hubo y quedaron pendientes mesas de trabajo, donde acordaron que se les pagaría a tres líderes su salario.
También en las mesas, el gobierno del estado se comprometió a cancelar las órdenes de aprehensión, que calcularon son 40, contra miembros del movimiento, giradas tras actos de protesta donde hubo quemas de edificios, cierre de avenidas centrales, bloqueos de autopistas, entre otras acciones que la Fiscalía consideró meritorias de delito.
“Las peticiones siguen: la cancelación de la Reforma Educativa y seguiremos exigiendo la presentación con vida de los 43 normalistas de Ayotzinapa. Nos vamos porque comentamos con la base y son los mandatos, este ciclo terminó y lo que sigue es reagruparnos, realizar brigadeos, alertar a los padres de familia en qué consiste la mal reforma laboral”, dijo Morales Vélez.
Apenas hace cinco días, la fracción del dirigente de la CETEG, Ramos Reyes Guerrero, que aglutina a mentores de la zona Norte, Acapulco, Costa Grande, Costa Chica y zona Centro, entregaron las oficinas del ex Ineban, un edificio de oficinas centrales de la SEG y levantaron su campamento que mantenían obstruyendo la avenida Ruffo Figueroa, al sur de Chilpancingo.
Al otro día hubo cartulinas con la leyenda: “Gracias señor gobernador por liberar la avenida Ruffo Figueroa”, en calles adyacentes a la vía que da a las oficinas de la CETEG y a las del sector central de la Secretaría de Salud. Las combis de transporte público pueden pasar por ambos carriles de la vía y los trabajadores regresan a sus oficinas de la SEG.
Ramos Reyes aseguró también que no hubo un acuerdo con el gobierno. En Guerrero, Michoacán, Oaxaca y Chiapas, la reforma educativa no ha avanzado, según la federación; sin embargo, opinó Reyes, “seguiremos exigiendo su cancelación, porque es regresiva a nuestros derechos laborales y privatiza la educación”. En su caso también hubo acuerdos similares con la administración estatal.
Padres de los 43 desaparecidos de Ayotzinapa se pronunciaron con decepción tras el retiro de la CETEG de las calles de Chilpancingo, pero aseguraron que continuarán con la búsqueda por la presentación con vida de sus hijos, porque esa es su principal encomienda.
