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Nayarit.
Su desparpajo lo convirtió en 2008 en un candidato rentable para el PAN, que en aquel año ganó la elección a la presidencia municipal de San Blas; sin embargo, el mismo desparpajo en el ejercicio de gobierno y las sospechas de malos manejos hicieron que a media administración el partido se deslindara de su edil, Hilario Ramírez Villanueva, Layín.
Este polémico personaje ha llamado la atención a nivel nacional por dos hechos: reconoció que robó “poquito” de las arcas municipales durante su primera gestión y levantó, en público, la falda a una chica con la que bailaba.
Hoy Ramírez Villanueva, quien presume ser empresario y tener una empacadora de mango en su natal Huaristemba, está en abierta campaña para intentar ser candidato independiente a la gubernatura de Nayarit durante la elección del siguiente año; su particular forma de hacer propaganda consiste en asistir a fiestas populares en los distintos municipios y lanzar billetes de 20 y 50 pesos al aire.
Fue en junio de 2014, durante un mitin de campaña para buscar un segundo periodo como alcalde de San Blas —municipio costero con alrededor de 45 mil habitantes—, cuando Layín se sinceró: “¿¡Que le robé a la presidencia!? ¡Sí le robé, sí le robé, sí le robé! Pero poquito porque está bien pobre. Nomás le di una rasuradita”. Su justificación era similar a la del arquetípico héroe que habitaba el bosque de Sherwood: “¡Lo que con esta mano me robaba (derecha), con esta (izquierda) se la daba a los pobres, compañeros!”.
El video provocó la aparición de Layín en medios de alcance nacional, donde días después cambió la versión de las cosas: “Todo fue una broma, no es cierto que haya robado dinero de la alcaldía, así soy yo...”.
En la red sigue disponible lo que muchos consideraron una confesión, pero la ovación que precedió a aquellas palabras parecían el preludio de la nueva victoria electoral; el hecho, incluso, no parecía trascendente para las autoridades electorales de Nayarit, que al ser cuestionadas al respecto dejaban ver su simpatía por el personaje de Layín: “Es una leyenda urbana, así es él y eso le gana más votos, le gusta a la gente”.
Excesos y pactos con el narco. Las fiestas de cumpleaños de Layin son famosas en Nayarit porque tiene la costumbre de invitar a cualquiera que deseé asistir para convivir con “un ruidito, un taquito y un traguito”, lo que se traduce en qué él pone la comida, el alcohol y el espectáculo; en eso gasta millones de pesos que, asegura, vienen de donaciones de sus “amigos”.
El 28 de febrero de 2015, ya como alcalde de San Blas, en un segundo periodo, Layín contrató a la banda El Recodo y ahí en el escenario, frente a todos los asistentes, en dos ocasiones levantó el vestido de la chica con la que bailaba exhibiendo su ropa interior.
Por el hecho, la Comisión para la Defensa de los Derechos Humanos de Nayarit (CDDH) solicitó al Congreso del estado iniciar un proceso de sanción administrativa contra el edil:
“Al levantar el vestido, realizó una intromisión ilegítima a su vida privada, exponiéndola al escarnio”.
La Comisión Legislativa de Igualdad de Género y Familia del Congreso de Nayarit y la Comisión para la Igualdad de Género del Senado interpusieron sendas quejas ante el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación.
Sin embargo, tras llamar a comparecer al alcalde, el Congreso local determinó que el hecho sólo ameritaba una amonestación privada para Layín, quien antes de ofrecer una disculpa pública a la chica que ofendió, culpó a los medios “amarillistas”.
Tras este tipo de situaciones, actores políticos de la entidad comenzaron a cuestionar el origen de los recursos de Ramírez Villanueva para hacer fiestas, rifar autos, regalar dinero y hacer viajes a los Estados Unidos para acudir a entrevistas televisivas. Fue en una de esas transmisiones en las que el edil propuso que para acabar con la delincuencia en el país es necesario pactar con el narco, pues “El Chapo es como cualquier persona”.
Según el portal de Transparencia de San Blas, Ramírez Villanueva gana un sueldo mensual de 40 mil pesos, por lo que muchos se preguntan de dónde salieron los dos fajos de billetes con 50 mil pesos cada uno que la noche del 17 de febrero “donó” durante la cena de recaudación de fondos para becas de la Universidad Autónoma de Nayarit.
Una posible respuesta: en marzo de 2015, el Órgano de Fiscalización Superior de Nayarit inhabilitó por 11 años de cualquier cargo público a Argelia Ramírez, tesorera de Layín entre 2008 y 2011. La dependencia la acusó de peculado, ejercicio indebido de funciones y desvío de recursos, sin embargo, las investigaciones no han alcanzado a Ramírez Villanueva.
Cabe recordar las palabras del mismo Layín durante aquel mitin en el que confesó haber robado: “Si por azares del destino llego al puesto y no les cumplo, mándenme a chingar a mi madre, se los digo de frente porque así soy”.