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Culiacán.— Generales, oficiales y tropas del Ejército y de la Fuerza Aérea Mexicana se solidarizaron con los soldados que fueron víctimas en una emboscada la madrugada del viernes cuando llegaban a Culiacán procedentes del municipio de Badiraguato, Sinaloa.
En conferencia de prensa, el general Alfonso Duarte Mejía, comandante de la Tercera Región Militar, comentó que este ataque contra un convoy militar se ve asociado a una cadena de hechos de violencia que se han presentado en Badiraguato, en donde se libra una lucha por el control de las siembras de drogas. Las evidencias recolectadas por trabajos de inteligencia ubican una lucha violenta entre los grupos que encabezan, Alfredo Beltrán Guzmán, El Mochomito, y sus primos, los hijos de Joaquín Guzmán Loera, dijo.
En un comunicado, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) informó que su personal expresa sus más sentidas condolencias a los familiares de los cinco elementos castrenses fallecidos en el cumplimiento de su deber y esperan la pronta recuperación de los 10 uniformados heridos.
La Sedena detalló que la madrugada de ayer, en la población de Bacacoragua, personal militar fue atacado y en respuesta resultó herido un individuo, huyendo el resto de los agresores.
El civil lesionado fue trasladado por los militares hasta el poblado de Badiraguato, en donde los servicios médicos no pudieron proporcionarle ayuda por lo que la Cruz Roja apoyó con una ambulancia para trasladarlo a Culiacán.
El personal militar que escoltaba la ambulancia y al herido fue atacado con armas de gran volumen y potencia de fuego, por un grupo de la delincuencia organizada que se estableció en la entrada de Culiacán, describió la Sedena.
“En estos hechos resultaron cinco militares muertos y 10 heridos, algunos de gravedad, así como un civil lesionado, conductor de la ambulancia, la cual se llevaron los agresores junto con la víctima”, precisó.
El presidente de la República, Enrique Peña Nieto, así como el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, enviaron sus condolencias a través de Twitter para los familiares de los soldados asesinados y el deseo de pronta recuperación de los sobrevivientes.
“El ataque a elementos del Ejército en Sinaloa no quedará impune. Los responsables de estos hechos responderán ante la ley”, advirtió el Presidente.
También Felipe Calderón Hinojosa, ex mandatario, mandó un mensaje a la Sedena a través de Twitter, en el que expresó su “solidaridad y gratitud con los soldados de México, con las familias de los caídos, en momentos de dificultad e indignación”.
En la Novena Zona Militar, en rueda de prensa, encabezada por el comandante general Alfonso Duarte Mejía; el gobernador de la entidad, Mario López Valdés; el procurador general de Justicia del estado, Marco Antonio Higuera Gómez, además del gabinete de seguridad del estado, el mandatario local relató que el C-4 reportó que un convoy con 17 militares que escoltaban a una ambulancia de la Cruz Roja fue emboscado a las 03:25 horas.
De las primeras evidencias se desprende que se trató de un grupo muy numeroso que se desplazaban en varios vehículos, entre ellos camionetas doble rodado blindadas, con fusiles Barret-calibre 50 montados en sus cajas.
Agregó que en el ataque que se produjo desde varios ángulos contra los elementos militares adscritos al Mando Especial, con sede en Badiraguato, las dos unidades Hummer en las que se desplazaban resultaron destruidas y consumidas por el fuego por detonaciones de granadas.
Durante la emboscada fue rescatado Julio Óscar Ortiz Vega, El Kevin, identificado por el mandatario local y el comandante de la Tercera Región, quien no tiene antecedentes penales, ni del fuero común ni federal.El procurador indicó que sólo tiene algunas infracciones de tránsito en el estado, sin mayores datos de él.
Vecinos de la zona habitacional cercana al lugar narraron los largos minutos de horros y zozobra que vivieron: “Fue una madrugada de terror, primero por las continuas descargas de armas de grueso calibre y después por las incesantes torretas de patrullas de policías y sirenas de ambulancias”, dijo uno de los testigos.
La Cruz Roja también lamentó los hechos e informó que el paramédico recibió un disparo de arma de fuego a la altura de la cadera.
“Su estado de salud es estable y su vida no corre peligro”, resaltó la Cruz Roja en un comunicado en el que llamó a la población a respetar la integridad física de los voluntarios de la institución. Por la noche, la PGR abrió una carpeta de investigación por los delitos de homicidio, daños, lesiones y violación a la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos.