Después de recibir denuncias por la desaparición de 14 personas en los municipios de Ayotlán y La Barca, la Fiscalía de Jalisco determinó que el hallazgo de cuerpos en la desembocadura del río Lerma al Lago de Chapala es resultado de una pugna entre dos grupos delictivos que operan en los límites entre Jalisco y Michoacán.
Tras encabezar un operativo en La Barca, el fiscal del estado, Eduardo Almaguer Ramírez, precisó que hasta el momento sólo se han encontrado 13 cuerpos en el río y no 15, como se manejó ayer.
El funcionario informó que en los hechos aparentemente están involucrados el subdirector de la policía municipal de La Barca, Nicolás “N”, quien se encuentra prófugo, y el primer comandante de la corporación José Luis “N”, quien ya está a disposición de la Fiscalía.
Según las autoridades de Jalisco, el responsable de ordenar este asesinato múltiple es un sujeto apodado “El Chulo”, quien supuestamente intenta reintegrar el cartel de La Familia Michoacana y opera en el municipio de Vista Hermosa, Michoacán.
Almaguer Ramírez indicó que las personas reportadas como desaparecidas en La Barca pertenecen a un grupo delictivo autodenominado “Los Bolillos”, mientras que los desaparecidos de Ayotlán integraban otro llamado “Los Bayos”.
Después de que el jueves por la noche una persona acudió a la Fiscalía de Jalisco a reportar la desaparición de cuatro personas, entre ellas una mujer, la dependencia tuvo las primeras pistas para esclarecer este crimen, explicó el fiscal.
Así, durante este viernes se realizaron varios cateos en fincas de la región y en una de ellas se detuvo a dos personas en posesión de droga; aún se investiga si están relacionados con el multihomicidio.
Además, se estableció un operativo permanente de la Fuerza Única Regional para vigilar La Barca y la frontera entre Jalisco y Michoacán.