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Pachuca.— A la primera hora de ser gobernador, Omar Fayad Meneses ríe en camisa arremangada, lleva la corbata aflojada. Entre la gente que lo abraza, comenta asuntos; le piden fotos.
Está afuera del teatro Gota de Plata, erigido en el recinto del Congreso, donde más de mil 200 personas han venido a presenciar ese rito —“¡sí, protestó!”—, al que llegó después de muchos años de trayectoria política, con tramos difíciles, ha dicho.
Festivo, comenta que su discurso se deshojó y tuvo que improvisar, cosa que pocos advirtieron, a no ser que una parte del principio el saludo a las grandes personalidades presentes lo ha dicho casi en el cierre de su intervención.
Desde la tribuna dijo que será un gobernador que irá a las comunidades, pueblos, regiones, abierto a escuchar, atender a la gente. ¿Y en mangas de camisa? ¿Sin escudo de seguridad ni de secretarios? “Así va a ser” el sexenio, dice.
Se va. Conduce el vehículo y lo acompaña su esposa, la actriz Victoria Ruffo; ella de rojo, en una hora de dicha radiante.
Una hora atrás, Omar Fayad Meneses ha visto a Carmen Salinas, la actriz y diputada federal, el emblema viviente —el otro era Juan Gabriel— del priísmo.
“¡Carmelita, gracias por venir”, le dice Fayad Meneses a la estrella del espectáculo y reina de la popularidad, que tiene de escolta al jefe de la 18 Zona Militar, general Armando Barrera.
“Mi consentido, mi hijito”, le dice Carmen Salinas al gobernador, mientras que a unos pasos atestiguan el trato familiar de ambos, el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, quien viene en representación del presidente de la República, Enrique Peña Nieto; y el senador Emilio Gamboa Patrón, coordinador de la bancada de la que surgió Fayad como candidato a la gubernatura.
También está atenta la titular de Sedatu, Rosario Robles, enlace del gobierno federal con Hidalgo, y el gobernador saliente, Francisco Olvera Ruiz, así como los ex gobernadores, Otoniel Miranda, Adolfo Lugo Verdusco, Miguel Ángel Nuño Soto y Jesús Murillo. “Espérenme seis años; en esa fila voy a estar”, dice.
Hace 20 minutos que Omar Fayad entró al recinto y ha caminado entre abrazos, felicitaciones, agradecimientos suyos, a quienes ahí presentes lo apoyaron para llegar al cargo.
En un momento intenso, el gobernador abraza con fuerza al arzobispo de la Iglesia Ortodoxa de Antioquia, Antonio Chedraui, a quien mencionará en su discurso, como líder espiritual.
Les dice que se siente arropado por los senadores priístas que han venido con Gamboa a felicitar a su compañero de grupo: Lilia Merodio, Raúl Cervantes, Arturo Zamora, Joel Ayala, Cristina Díaz y Diva Gastélum, entre otros.
El presidente del Senado, Pablo Escudero (PVEM), Mariana Gómez del Campo (PAN) e Isidro Pedraza (PRD) forman parte del bloque de senadores asistentes. Son tantos que Osorio Chong ha dicho a Gamboa que allí podría sesionar hoy la Cámara Alta.
Osorio Chong, quien cuando es mencionado por Omar Fayad, en el bloque de ex gobernadores, levanta una larga, clara ovación, que lo delata como hombre con gran reconocimiento local.
El cartel del nuevo gobernador da para haber convocado 13 gobernadores, cuatro más electos, así como siete hidalguenses con responsabilidades relevantes cerca de Peña Nieto.
Un clásico del panismo está presente y Omar Fayad lo abraza con afecto. Es Diego Fernández de Cevallos, un político legendario de tiempos turbulentos.
