Por diversas agresiones y agravios en contra de reporteros, fotógrafos y camarógrafos durante la cobertura informativa, medios de comunicación impresos, electrónicos y digitales emitieron un “veto” en contra de la Sección 22 adherida a la CNTE, según un desplegado.
El más reciente caso ocurrió el pasado sábado, en que un grupo de docentes intimidó a la fotorreportera Citlalli Cid, quien cursa un embarazo de siete meses y a quien obligaron a borrar imágenes que había tomado del “plantón”; los hechos sucedieron a media cuadra del palacio de gobierno.
De acuerdo con el desplegado dirigido a las autoridades de los tres niveles de gobierno, a la CNDH y a la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO):
“Resulta absolutamente inaceptable toda forma o intención restrictiva o de censura, y más cuando estas agresiones son perpetradas por grupos como la Sección 22, la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) y organizaciones afines, y son toleradas o encubiertas por las
autoridades.
En Oaxaca, los trabajadores y las empresas de la información hemos vivido una larga historia de hostigamientos y ataques contra nuestra labor”.
Condenaron las agresiones recientes, entre ellas el 20 de julio la retención violentamente en Nochixtlán a trabajadores de TV Azteca; el 21 de julio la agresión al fotoperiodista Mario Jiménez Leyva, del diario “Noticias”; el 1 de agosto acosaron a Ismael García, reportero del mismo medio y corresponsal de “El Universal”.
El 31 de agosto cerraron una radiodifusora en Puerto Escondido y retuvieron a los trabajadores; también han acosado en distintas ocasiones a la reportera Yamilet Carranza; el 17 de septiembre actuaron contra la fotorreportera del periódico “Tiempo” Citlalli Cid, “ante la mirada y omisión de policías que atestiguaron y no intervinieron”.
“Ante tales hechos, no podemos realizar una cobertura informativa si las agresiones son sistemáticas; si no hay un compromiso serio por respetar y garantizar la integridad física de los trabajadores de los medios, el ejercicio periodístico, la libertad de expresión y las empresas de comunicación.
“Mientras reporteros, columnistas, fotorreporteros, camarógrafos y conductores sean amenazados, señalados, vejados o impedidos para realizar libremente su trabajo, hemos decidido no exponerlos a cubrir periodísticamente las actividades de estas organizaciones”, señalaron.
Exigieron al Estado garantías para realizar la labor informativa y a las organizaciones que cesen las amenazas, los señalamientos, el acoso y las medidas de presión.
cfe