Monterrey.— La Comisión de Hacienda del Congreso de Nuevo León dictaminó ayer 236 de las 239 cuentas públicas que tenía como rezago desde hace tres Legislaturas; en tres expedientes de fideicomisos estatales no hubo acuerdo y quedaron en reserva.
Entre las cuentas rechazadas por los legisladores destacan las de 2013 y 2014 del ex gobernador Rodrigo Medina y una de José Natividad González, también ex mandatario priísta, correspondiente al ejercicio fiscal de 2008.
Por unanimidad rechazó las cuentas públicas de Margarita Arellanes Cervantes, ex alcaldesa de Monterrey, correspondientes a los ejercicios fiscales de 2013 y 2014, por presuntas irregularidades en pagos a proveedores y otras afectaciones a la hacienda municipal.
En total, 107 cuentas fueron rechazadas, 129 tuvieron dictamen aprobatorio y tres, que corresponden a fideicomisos, serán analizadas más adelante, puesto que se registró empate en votaciones.
Los coordinadores de todas las bancadas del Congreso se felicitaron por los pactos en los que, aseguraron, ningún diputado actuó por consigna. Expusieron que se espera que al poner los expedientes a la consideración del pleno, en el periodo extraordinario de mañana, habrá debate y es posible que haya cambios en el sentido de algunos dictámenes. Arturo Salinas Garza, líder de la bancada del PAN, señaló que el Congreso de Nuevo León dio ayer un paso muy importante en el combate a la corrupción para que se castigue a los funcionarios que han sido cuestionados por los ciudadanos.
Agregó que esto habla bien del trabajo que están haciendo los diputados al dictaminar cuentas que estaban rezagadas desde hace tres legislaturas y, sobre todo, “que estamos privilegiando el combate a la corrupción, la transparencia y dejando atrás la politiquería”.
El coordinador del grupo legislativo del PRI, Marco Antonio González Valdez, afirmó que echaron abajo especulaciones en el sentido de que iban a mayoritear las votaciones para que fueran aprobadas las cuentas de funcionarios de su partido.
Salinas Garza, coordinador de la bancada blanquiazul expresó que con ello queda demostrado que no serán tapaderas de sus compañeros de partido.