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Juchitán.— En medio del desconocimiento y la resistencia por parte de los transportistas y de la ciudadanía, en las primeras horas de este lunes entrará en vigor el primer reglamento de Tránsito y Vialidad en la historia de este municipio zapoteca, cuyo sistema de transporte es caótico.
El reglamento de Tránsito fue aprobado el 8 de abril de este año por los integrantes del cabildo juchiteco y tiene el propósito de sentar las bases para que los conductores se ajusten a la cultura de la legalidad, dijo el responsable de los agentes viales, Martín Albino Mendoza Aquino.
“No conocemos el reglamento, nadie nos lo dio a conocer”, señaló el dirigente de 65 taxistas del sitio San Vicente, Miguel Ángel Esteva Pineda, quien argumentó que por ahora su atención está concentrada en impedir “el ingreso ilegal” de más automóviles de alquiler.
La ciudad, fundada en 1825, tiene unos 80 mil habitantes, de acuerdo con reportes del Inegi, y tiene un padrón estimado de 10 mil vehículos, entre ellos 500 taxis y tres mil mototaxis, la mitad de estos últimos opera sin concesiones.
El primer reglamento de Tránsito, que entrará en vigor este lunes, contiene 13 títulos con 275 artículos y tres transitorios en los que establecen derechos y obligaciones de los automovilistas particulares y del servicio público, así como de los comerciantes y establece las sanciones.
La alcaldesa electa de esta ciudad, Gloria Sánchez (PRD), quien asumirá el poder el 1 de enero de 2017 y es dirigente de un grupo de mototaxistas declaró que si el reglamento “es una herramienta para poner orden en el transporte, estamos de acuerdo”.
El actual ayuntamiento, que preside Saúl Vicente Vásquez (PRD), tiene entre sus regidores a varios dirigentes y asesores de taxistas y mototaxistas que a partir de 2011 iniciaron la disputa por espacios públicos y la clientela, lo que facilitó la anarquía en materia de vialidad.
“Nuestra ciudad necesita orden en el transporte. No podemos seguir en el caos y por lo tanto, aunque no conocemos el reglamento, nosotros vamos a acatarlo”, expresó el dirigente de los mototaxistas Nueva Generación, René Vásquez, quien también es regidor electo.
Para algunos ciudadanos, el reglamento va en contra de usos y costumbres que se hicieron leyes no escritas, como el hecho de prohibir, salvo el pago correspondiente, que se cierren las calles para organizar fiestas o preparar el cemento para colar los techos de las viviendas.
El reglamento obliga, entre otros aspectos, a que los conductores de los vehículos del transporte público cuenten con el respectivo uniforme y prohíbe, en el caso de mototaxistas, que presten el servicio “en short o chanclas” y establece multas que oscilan entre 12 y 25 salarios mínimos.
Con 191 años de haber sido elevada a ciudad, Juchitán comenzó a tener drenaje y calles pavimentadas a partir de 1988 y desde ese entonces experimentó un crecimiento desbordante de automóviles.
El reglamento de Tránsito fue socializado desde su aprobación y no tendrá naturaleza coercitiva, sólo tiene el propósito de sentar las bases para que nos conduzcamos en la cultura de la legalidad, dijo el también comisario de Vialidad, Martín Albino Mendoza.
Para impedir que los conductores de vehículos y mototaxis circulen en sentido contrario, hablen por teléfono al conducir o se estacionen en áreas prohibidas, 20 policías viales vigilarán la ciudad.
