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En el periodo vacacional aumenta el consumo de productos “milagro”, sobre todo los que se utilizan para adelgazar, embellecimiento y tratar enfermedades degenerativas.
La Secretaría de Salud, a través de la Comisión Estatal de Protección contra Riesgos Sanitarios (Coesprisson), informó que esto se debe a que la población pretende reducir el peso acumulado durante el año, por lo que deciden utilizar este tipo de productos para lograrlo, pero pueden producir efectos que dañan la salud.
De acuerdo a la Secretaría de Salud federal, la utilización de fármacos “reductores” puede provocar efectos secundarios negativos e irreversibles, tales como el incremento de colesterol y triglicéridos, y en casos más severos, tromboembolias e infartos.
Además, este tipo de productos se deben consumir bajo prescripción médica, debido a que sólo funcionan en personas sin antecedentes de enfermedades hereditarias o crónico degenerativas, por los efectos que puede causar, por lo que se debe evitar la automedicación.
Los productos “milagro” se encuentran en la línea entre un suplemento alimenticio y un medicamento, ya que el primero no puede curar, aliviar o tratar alguna enfermedad y la medicina sí, debido a que pasó por un protocolo de investigación.
Un suplemento alimenticio únicamente es un producto que contiene vitaminas y minerales, puede contener extractos de fruta o hierva, pero en ocasiones para vender más, en su publicidad prometen propiedades que no tiene, ahí es cuando se le conoce como producto “milagro”.
El suplemento es un producto que no debe representar ningún riesgo a la salud, el cual puede ser recomendado por un médico, se puede adquirir en un punto de venta o una farmacia, con el fin de complementar algo que hace falta en tu dieta.
La obesidad, una enfermedad
La obesidad y sobrepeso en México son un problema de salud y no algo meramente estético, por lo que se deben de tratar como una enfermedad por profesionales de la salud, comunicó la Secretaría de Salud.
La obesidad es un problema de salud pública que se transmite de padres a hijos, se heredan modelos alimenticios, que pueden transformarse con educación, para lo que la SS implementa diversos programas en todas las áreas.
La conducta alimentaria se va gestando desde el seno del hogar, donde ésta puede ser predominantemente perjudicial; el sedentarismo, los factores hereditarios, las conductas impulsivas al comer, influyen de manera determinante en los hábitos alimenticios de las personas.
Así mismo este problema está directamente ligado a los problemas de salud mental, existen evidencias científicas de la relación que existe entre el factor estrés y la presencia de sobrepeso, obesidad y diabetes; actualmente la persona que sufre de diabetes tiene 60% de riesgo de presentar depresión.
En Sonora la prevalencia de sobrepeso y obesidad es de un 71.3%, es decir que alrededor de 70 personas de cada 100 presenta sobrepeso u obesidad, de una población total de 2 millones 957 mil 787 personas.
Entre los programas encaminados a establecer estilos de vida saludable está: Programa de alimentación y actividad física, Programa Adulto y Adulto Mayor, Programa Infancia y Adolescencia y Programa Salud Reproductiva.
RECOMENDACIONES:
• Cuidado con los productos que van de boca en boca y no tienen publicidad, porque muchas veces no dan ticket y no se puede reclamar si se presenta un efecto secundario.
• Cuidado con los productos que no son recomendados por los médicos y en todo lo que se ingiere sin recomendación médica.
• Ante cualquier situación o duda consultar primero a un médico.
• Ante alguna duda sobre algún producto o poner una queja se puede llamar a Coesprisson, a los teléfonos 212 60 93, 212 21 35 y lada sin costo al 01 800 4 RIESGO (74 37 46), página www.saludsonora.gob.mx
afcl
