El pasado martes, un grupo de alpinistas -entre ellos tres mexicanos- fue sorprendido por una avalancha en el monte de Huascarán, localizado en Los Andes peruanos y considerado “la joya de la corona” del alpinismo.
Este monte es el quinto más alto del Continente Americano con una altura de 6 mil 700 metros sobre el nivel del mar.
La primera vez que alguien conquistó la cima fue el 20 de julio de 1932.
El nevado de Huascarán se localiza en la cordillera occidental de Los Andes, en las provincias de Yungay y Carhuaz, región de Áncash.
El macizo tiene tres picos y está enclavado en la llamada Cordillera Blanca.
El accidente del martes pasado ocurrió en la zona conocida como La Garganta o La Canaleta, a una altura de 5 mil 800 metros.
Al respecto, Ulises Ávila, coordinador del grupo de alpinistas, dijo que la avalancha sucedió cuando la expedición estaba en un canal muy vertical, arriba de los 70 grados de inclinación.
“No hicieron nada mal, fue un desafortunado accidente, es una zona donde ocurren avalanchas”, dijo.
Además, destacó que el nevado de Huascarán, en la sierra norcentral de Perú, es considerado la joya de la Corona del alpinismo.
“No cualquiera lo logra, es un deporte de mucho riesgo, tratamos de hacer las cosas bien”.