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Hermosillo.— Desde hace siete años, padres de los niños y niñas víctimas del incendio de la Guardería ABC, ocurrido el 5 de junio de 2009, se encargan de recordar a la sociedad que la justicia tiene una deuda con los menores.
Para memorar a sus hijos fallecidos —25 niñas y 24 niños—, desde la noche del 4 de junio y hasta los primeros minutos del domingo, realizaron una vigilia frente a las instalaciones de la estancia infantil, ubicada entre las calles Mecánicos y Ferrocarrileros.
La vigilia inició con una serenata y la primera canción fue Sólo el amor, de Silvio Rodríguez, seguida de Sólo le pido a Dios, de Mercedes Sosa, y Sin tu latido, de Luis Eduardo Aute.
La melancolía y tristeza rondaban el lugar; fue una noche de viento cálido. A las 8:00 horas algunos padres y familiares regresaron a la misa en honor a los 49 menores fallecidos.
Luego de la liturgia se hizo pase de lista de los pequeños y los presentes contestaban “no debió morir”. Este acto, para conmemorar un aniversario más de la tragedia infantil más grande de México, terminó cuando los asistentes soltaron al cielo decenas de globos rosas, blancos y azules.
Tres horas después siguieron las misas del templo San Jósé, ubicado en el bulevar Vildósola, y la del Sagrado Corazón, de la colonia El Ranchito.
A las 12:00 horas, niñas y niños afectados con quemaduras y lesiones internas asistieron a la misa y convivio que les ofreció el sacerdote Martín David Lobio Arvizu en la parroquia Santa María Madre de Dios, de la colonia Cuauhtémoc de esta ciudad.
La marcha. A las 18:00 horas, cientos de personas se congregaron en las instalaciones de la Guardería ABC para participar en una marcha en la que exigieron justicia por la tragedia que dejó un saldo de 49 niños muertos, 26 lesionados por quemaduras y 81 expuestos por la inhalación de humo.
Al grito de “¡ABC nunca más!, ¡justicia ABC!, ¡no están solos!” avanzó la caminata, de 5.8 kilómetros, hacia las escalinatas del Museo de la Universidad de Sonora.
Con banderas y globos rosas y azules, los manifestantes expresaron el respaldo a los padres de las víctimas del voraz incendio ocurrido a las 14:40 horas del viernes 5 de junio de 2009.
Al pasar por la iglesia San José soltaron los globos y repicaron 49 campanadas en memoria de las víctimas.
Cayó la noche y el contingente avanzó hacia las escalinatas del museo, donde los padres expresaron su indignación por la ineficacia de las investigaciones sobre el caso y por la resolución emitida por el Juez Primero de Distrito que absolvió a tres de los 22 procesados, y sentenció de 20 a 29 años de prisión a quienes consideró responsables de la tragedia. “Un año más y la justicia sigue ausente, seguiremos rogando”, expresaron con profunda tristeza los padres de las víctimas.
Marchan en la CDMX. En el marco de la caminata que se llevó a cabo en la Ciudad de México, Abraham Fraijo —padre de Emilia Fraijo Navarro— externó su temor de que haya un intento de dar por concluidas las indagatorias.
Señaló que en lugar de dar justicia al caso, la resolución del Juez Primero de Distrito contra 19 de los 22 implicados en el caso (todos funcionarios menores), más allá de proveer justicia para las víctimas, es una muestra de la intención de la autoridad de dar por concluido el caso sin sancionar a los verdaderos responsables.
Calificó la resolución del juez como una “simulación muy cruel” en contra de los familiares de los niños.
Abraham encabezó la movilización en memoria de su hija Emilia.
Una de las actividades fue pintar esténciles en la Estela de Luz, donde hay placas en el piso con los nombres de más víctimas de la violencia y desaparición forzada.