La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) realizó valoración y atención de un ejemplar de lobo marino en el municipio de Playas de Rosarito, Baja California, que presentaba al parecer una afectación producida por algún arte de pesca o actividad antropogénica.
En un comunicado, la dependencia señaló que tras recibir un reporte en el Centro de Control, Comando, Comunicaciones y Cómputo C-4, de dicha localidad, personal de la Procuraduría se dirigió al sitio señalado, ubicado a la altura del kilómetro 31+500 de la carretera libre Tijuana-Ensenada.
El espécimen fue localizando y después de una revisión se constató que se trataba de un ejemplar de lobo marino de la especie Zalophus californianus.
Tras su ubicación, personal de Profepa determinó la necesidad de valorarlo pues el ejemplar evidenciaba una afectación muy visible a la altura del cuello, ocasionada al parecer por algún arte de pesca o actividad antropogénica.
Debido a lo anterior, personal de la Procuraduría continuó con el monitoreo del ejemplar, a fin de estudiar su comportamiento y una hora después a aproximadamente 10 kilómetros al norte del sitio se realizaron maniobras de sujeción para su auscultación, atención y valoración por un médico veterinario y personal especializado.
Conforme el Protocolo de Atención a Varamientos de Mamíferos Marinos, vigente desde junio de 2014, se llevó a cabo su atención, procediendo a retirar filamentos de algas y plástico que se encontraban al interior de lo que era ya una cicatriz a la altura del cuello.
De acuerdo con el comunicado, el espécimen no presentaba alguna herida abierta y estaba en buenas condiciones de salud, por lo que personal de Profepa se alejó del lugar, para que el lobo marino pudiera descansar, el cual instantes después retornó por sus propios medios al mar.
jlcg